Paulino, los peluqueros y la policía

Sabemos que Paulino Rivero es un hombre que se adapta al medio y no sabe decirle que no a nadie. Por eso cuando un esteticista le dijo siéntese por aquí presidente que voy a dejarlo muy guapo, Paulino se sentó. Y el esteticista empezó recortándole las patillas y se le fue la navaja (naife en “habla canario”), y le cortó la vena de presidente nacionalista canario por encima de todas las cosas que Rivero tiene desde que PP Manolo Arriba España apoyó su investidura aquella tarde en la que la moto del cartero de Castro Cordobés llegó al aeropuerto antes de que sus señorías votaran lo que ponía la carta. Y claro, si la vena nacionalista pierde sangre corres el peligro de abandonar principios inamovibles. Eso fue lo que ocurrió en la reunión con los peluqueros y cuando se levantó de la silla del esteticista Paulino Rivero declaró a los periodistas que la Policía canaria puede esperar.

Dijo Paulino que en tiempos de crisis las familias cambian sus comportamientos “unos nos habíamos planteado cambiar el coche, cambiar el piso o hacer un largo viaje, pero vino la crisis”(sic). Lo que no entiendo es por qué el presidente usó la primera persona para decir esa frase, ya que incurrió en tres contradicciones innecesarias porque en este año de crisis Paulino y su socio PP Manolo decidieron que les compráramos coches oficiales nuevos, además Paulino ha estado cambiando su pisito presidencial de Ciudad Jardín y como presidente preelectoral en febrero de este año (cuando él ya había descubierto la crisis) hizo su largo viaje a Venezuela para saludar a los compatriotas. Así que Paulino no ha cumplido ninguna de las tres cosas que haría una familia en crisis.

A la salida del importantísimo congreso de peluqueros nuestro presidente anunció que no pondrá en marcha la policía canaria hasta que “escampe el temporal”. Aunque la verdad es que no sé si lo hizo por la crisis o porque los esteticistas le dijeron que los uniformes que presentó José Miguel Ruano eran muy feos, que un policía vestida de rojo magma, amarillo arena y blanco sal es una horterada. Pero no me voy a poner en plan Juan Fernando y voy a felicitar a Paulino Rivero por su decisión tan pragmática. Y después de esta humildad soriana que me permite reconocer un acierto de nuestro presidente quiero aprovechar para hacer una petición a Ruano: ¿ ya que estamos en crisis, me podrías prestar el uniforme policial que hicieron para el maniquí, porfa, que los carnavales están a la vuelta de la esquina y ya no me entran los pantys del traje de Caperucita Roja?. Gracias.

Juan García Luján