Pero las bombas de relojería que ha querido ir colocando Macario Benítez no terminan en la Consejería de Medio Ambiente, sino que se extienden también al Cabildo de Tenerife. Sin quererlo, el acalde socialista está en el mismo bando que el dirigente de Ican Miguel Ángel Pulido, recientemente nombrado viceconsejero de Ordenación del Territorio en sustitución del irrepetible Fernando González. Pulido se ha puesto a mirar con lupa el asunto y es de los que piensa que el Ayuntamiento ha actuado mal, pero no es la única administración en apuros. Chocará con los poderes fácticos chicharreros, que no sólo se encuentran en ATI, sino también en el mismísimo pelotazo de Las Teresitas. De ahí que Macario se muestre tranquilo pero soltando la lengua a paseo, que es especialidad de la casa.