Amenazas e injustas presiones. Así de crudo se despachó Fuentes Curbelo contra López Aguilar. Su discurso de que la moción de censura ha estado avalada -oficiosamente- por la cúpula socialista tiene sólidas bases de coherencia. Y de su furibunda reacción al comunicado se deduce que ha sido mayor la amenaza fantasma de retratar de por vida el nuevo proyecto socialista a los intereses particulares de González Arroyo, y de sus socios dentro y fuera del PSOE majorero, que responder con contundencia a semejantes acusaciones. Porque durante todo este Día D, los buzones de voz o casi mecánicos “no hago declaraciones” saltaban al otro lado de cada teléfono móvil a mano para buscar reacciones a la andanada del secretario del PSOE majorero. Que ya ha avisado: “y en días habrá sorpresas”. ¿Más?