Este jueves era el día señalado para que la diputada nacional del PP Mercedes Roldós respondiera ante el juez por la deuda que contrajo la empresa del ramo de la hostelería discotequera en la participaba junto a su marido, el flamante director del 112, Hernández Vulcan, dios nos coja confesados. Los pecadillos en cuestión de esta mujer en su faceta empresarial se cifran en 42.000 euros de nada que dejó a deber Vediamoci -que así se llama la empresa en cuestión-, a una sociedad especializada en toldos y cubiertas de la que requirió sus servicios y si te he visto no me acuerdo. No está mal para dos cargos públicos. En el caso de la dama mejor aún si tenemos en cuenta que tras militar siete años en el PSOE decidió pasarse al PP huyendo de la corrupción. Y militando donde ahora milita la tienen tan ocupada que olvidó pagar.