La institución del Diputado del Común, dependiente del Parlamento de Canarias, tiene como principal objetivo defender los derechos y libertades constitucionales de los ciudadanos de Canarias, como se puede leer en su web. La deriva que ha tomado esa institución desde que tiene a su frente al ex magistrado Manuel Alcaide está conduciendo a situaciones verdaderamente aberrantes y, desde luego, bastante alejadas de esos principios inspiradores de actuación. El último episodio que directamente e involuntariamente parece estar protagonizando tiene que ver con una vulneración de un derecho fundamental, el de la libertad sindical. Porque una protesta del Diputado del Común ante el director-editor de El Día ha provocado el despido de la secretaria del comité de empresa de Editorial Leoncio Rodríguez, S.A., Dory Merino. Este martes por la mañana se consumó en forma de una surrealista carta del empresario en la que se le comunica a la representante sindical que se le despide por haber publicado de manera insatisfactoria para el Diputado del Común una nota aclaratoria que remitió tras publicarse que se atascaban las quejas de los ciudadanos por problemas informáticos. La noticia está siendo comentada ya en los foros especializados en información sobre periodistas.