Tres emisoras mudas y nadie sabe cómo ha sido

Por lo que han venido diciendo los testigos y la magistrada imputada estos últimos meses, tres emisoras de radio teldenses se quedaron mudas el pasado 14 de julio sin que nadie se atreva a día de hoy a asumir la responsabilidad correspondiente. Porque mientras que la juez sostiene que ella no quería decir lo que decía su auto de entrada y registro, la secretaria judicial se reafirma en que actuó en base a esa resolución, lo mismo que hace la Guardia Civil actuante, que es la que ejecuta de manera efectiva el corte de las emisiones y esa flagrante vulneración de derechos fundamentales. Pero, a excepción de los peritos que actuaron y que afirman no haber tomado decisión alguna, todos los presentes en la entrada y registro de Canal Telde reconocen no tener ni pajolera idea de cómo se corta la emisión de una radio ni para qué sirve una mesa mezcladora, un ordenador Viva o un cable de emisiones. Ahora, eso sí, convenientemente aleccionados no se sabe muy bien por qué conocimiento sobrevenido, prácticamente todos aseguran que si las radios no reanudaron sus emisiones con otro cable distinto al precintado judicialmente fue porque no quisieron. Y todo eso después de haber detenido a todos los empleados y directivos presentes. Qué listillos, oye.