No les podemos aclarar si Marisa Tejedor lo sabe, si son sólo cosas de Mauricio, si Adán Martín está o no está al corriente. Pero sí les podemos confirmar que la operación está hecha, bendecida y pendiente de que el registrador mercantil la inscriba. Nos referimos a la venta de acciones del Gobierno y de Endesa en la empresa del gas, Gascan, la misma con la que se pretende gasificar Canarias por la vía de Arinaga y de Granadilla, dios mediante. Nos hemos enterado por radio Macuto porque el Gobierno, contrariamente a lo que dicen todos los expertos consultados, no se encomendó ni a las leyes ni a los códigos de buena conducta empresarial, aquella y aquellos que obligan a la luz, la publicidad y los taquígrafos. ¿Y para qué? Pues para dar entrada en el negocio, o supuesto negocio, a doce empresarios elegidos por alguna mano inocente que no sabemos exactamente cuál de las mentadas es.