Claro que el PSC se juega mucho en este asunto. Recordemos que si recupera el diputado perdido en El Hierro por culpa del voto emigrante, pasaría a ser segunda fuerza política en el Parlamento, lo que automáticamente le supondría arrebatar al PP su senador por la Comunidad Autónoma y un representante en la Mesa de la Cámara. Sin embargo se ha abierto en el PSC un debate interno acerca de la conveniencia de seguir litigando en esta cuestión. De un lado están los que quieren llegar incluso a Estrasburgo, y de otro los que prefieren dar por zanjadas las incursiones judiciales socialistas de los últimos años. En medio se sitúan los que opinan que hay que elegir mejor los asuntos antes de meterlos en los tribunales, porque están cabreados con que el despacho de Josefina Navarrete ya haya cobrado seis kilos viejos en honorarios sin que se vea un sólo síntoma de que en asuntos como Jinámar no saldrán trasquilados los socialistas. Y otros se lleven la lana.