La actual presidenta del PP tinerfeño, Cristina Tavío, ha decidido presentarse a la reelección, más por pararle las patas a un ser tan peligroso como Ángel Llanos que por ganas de continuar en el cargo. Ella, como muchos militantes serios del PP, consideran que Llanos no es la solución sino un problema más para los conservadores en una isla donde es difícil romper la hegemonía de ATI. Pero la ambición del primer teniente de alcalde de Santa Cruz no tiene límites, y su manera de comprar voluntades está dando como resultado la apariencia de que es el que cuenta con mayores apoyos. El sábado programó un acto de apoyo inquebrantable al que él mismo no acudió por estar en un concurso de tatuajes. Pero mandó a los portavoces del PP en los Ayuntamientos de Icod de los Vinos, Santiago del Teide, El Rosario, Granadilla de Abona y La Laguna. Pero los pata negra y los municipios con mayor aportación de compromisarios al congreso insular siguen estando con Cristina Tavío.