La palabra crisis, que tanto se evitó en los meses previos al verano que ahora termina, parece haberse quedado corta. la quiebra del cuarto banco norteamericano, el Lehman Brothers, los continuos desplomes de las Bolsas mundiales, las apreturas del Euribor y la tremenda sensación de que esto hace aguas por todas partes, están llevando a muchos expertos a hablar de una gran depresión. En Canarias, los agentes económicos y sociales cruzan los dedos para que el turismo no se resienta de modo severo, sin que se crea con demasiada fe que las medidas que anuncia el Gobierno de Rivero puedan servir para algo. De momento nos quedamos con un dato escalofriante: desde finales de julio hasta principios de este mes de septiembre, el número de concursos de acreedores solicitados al Juzgado de lo Mercantil de Las Palmas pasaron de 22 a 45. Incluimos en esas cifras los que han sido planteados por personas físicas, rechazados en su mayoría por venir con truco.