Mucho “dientes, dientes”, como le decía La Pantoja a su Cachuli en los días previos a que estallara el escándalo de corrupción marbellí. Dientes y alabanzas es lo que han interpretado y proferido nuestro Paquirrín de Mogán y Onalia Bueno ante el hecho de haber sido citados “tranquilamente” por el juez en vez de ser detenidos -dificilmente se detiene por segunda vez a alguien, aunque se le impute un delito diferente- y sentirse “alcalde del PSOE” por eso mismo. Pero ni los dientes-dientes ni esas histriónicas declaraciones esconden la preocupación en esos mandamases del PP moganero, a los que se les escucha preguntar a la abogada insistentemente que si lo que hicieron con Grupo Europa “no es trato de favor, ¿no?”. No, no lo es: es cohecho, según el magistrado, que lo imputa para mejor proveer.