Más arriba les decíamos que desconocemos con exactitud lo que motiva tanta inquietud entre algunos empresarios portuarios hasta el punto de pretender en septiembre que el presidente de la CCE, Sebastián Grisaleña, dimita como consejero del puerto para ceder su silla a Juan Freire. Pero como somos de común inquietos, les proponemos algunos asuntos. Por ejemplo, jeringa cantidad perder contratos de muchos ceros otorgados a Germán Suárez de manera irregular, ahora en los tribunales. Cabrea que a Freire se le haya anulado el rescate abusivo de una concesión por la que se le iban a pagar nueve millones de euros. Cabrea que la Fiscalía del Estado esté investigando el famoso contrato del 3,5% en el negocio eólico que otorgaba unas ventajas a los Esquível tan abusivas que hasta da terror contarlo. Y todo con Arnáiz de brazo ejecutor de las imposiciones de Soria, a ver si alguien todavía no se ha caído del guindo.