Continúan, probablemente al ritmo que tienen que ir, las tareas de extracción de arena de la Playa de las Canteras, después de que tuviera que intervenir el Ayuntamiento para que Costas no incordiara a los sufridos empresarios hosteleros, que pedían que no se trabajara antes de las once de la noche delante de las terrazas de la avenida. Así se hizo, y con las naturales incomodidades, comenzaron los trabajos. Al principio, los operarios de las pesadas máquinas que cada noche extraen camiones y camiones de valiosísimo material eran muy cuidadosos con el aspecto que debía presentar la playa a la mañana siguiente: dejaban bien aplanadas las zonas de maniobra y perfectamente delimitados los montículos pendientes para continuar de nuevo de madrugada. Pero ya no, ya se permiten dejar la playa lista para la siembra, con sus abultados surcos donde plantar bañistas. Una estampa de excelencia turística para exportar al mundo entero.