El TSJC mantiene la paralización de las obras del proyecto turístico Cuna del Alma

Imagen del proyecto de Cuna del Alma junto a la playa del Puertito de Adeje

Toni Ferrera

1

El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha rechazado la solicitud presentada por el Ayuntamiento de Adeje de levantar la suspensión de las obras del proyecto turístico Cuna del Alma, en el Puertito de Adeje, efectuada en noviembre de 2022 ante una “amenaza inminente de daño ambiental” por la presencia de la viborina triste, una planta protegida, según reza la resolución de paralización del Gobierno de Canarias.

En un auto fechado el 27 de julio de este año, el alto tribunal canario mantiene la suspensión porque “no se ha realizado un análisis de la posible afección de las distintas unidades de obra previstas en el proyecto de urbanización sobre los hábitats y especies objeto de protección”. El TSJC destaca que aún no se dispone de una valoración de los posibles daños ni tampoco del grado de alteración de los mismos, por lo que en estos momentos la paralización “[está] dirigida a la protección de los hábitats naturales”.

El Ejecutivo regional ordenó a la promotora de Cuna del Alma detener las obras hace poco más de diez meses por la aparición en la unidad de actuación de la viborina triste (Echium triste), una planta incluida en el Catálogo Canario de Especies Protegidas, reservada a aquellas especies silvestres que sin estar en ninguna de las dos situaciones de amenaza (en peligro de extinción y vulnerable) son “merecedoras de atención especial en cualquier parte del territorio de la Comunidad Autónoma en función de su valor científico, ecológico, cultural o por su singularidad o rareza”.

En el Puertito de Adeje, los técnicos del Gobierno autonómico han confirmado que “no solo existe un nuevo núcleo poblacional de esta especie protegida en el ámbito,” sino que su hábitat “alberga las condiciones necesarias para el desarrollo óptimo de nuevos ejemplares de la especie”. En base a la información disponible, el mismo Ejecutivo prohibió autorizar ninguna actuación que conlleve el arranque, corte o traslado de ejemplares. Y al mismo tiempo, solicitó una cartografía sobre la distribución actual y potencial de la viborina triste, así como “estudios similares” a la Viceconsejería de Lucha contra el Cambio Climático y Transición Ecológica.

En estos momentos, sin embargo, todavía “no se dispone de un estudio sobre la presencia de los valores ambientales protegidos por la normativa estatal y regional en todo el ámbito de desarrollo del proyecto”, según el auto del TSJC, que recoge que “con la información bibliográfica obrante (…) se tiene constancia de más de 65 especies protegidas que hacen algún uso del territorio” donde pretende llevarse a cabo Cuna del Alma. Además, el alto tribunal canario cita un “estudio parcial encargado por el Cabildo de Tenerife” que detalla “hasta un incremento del 339,53% de superficie de un hábitat de interés comunitario que ha sido intervenido en las obras iniciadas”.

En este contexto, el TSJC expone que “en un momento tan liminar como este” no existen los suficientes elementos de juicios para suspender la paralización, solicitada por el Ayuntamiento de Adeje, principal administración valedora de la iniciativa pese al aluvión de críticas recibidas. Es conveniente recordar que la empresa promotora de Cuna del Alma ya fue expedientada por la Agencia Canaria de Protección del Medio Natural (ACPMN) por no presentar un estudio de impacto ambiental sobre el proyecto urbanístico. Y también fue sancionada por la Dirección General de Patrimonio del Gobierno de Canarias por la “alteración y destrucción significativa de un yacimiento arqueológico” en la zona.

Por todo lo expuesto, el TSJC sostiene que el recurso presentado “carece de efecto suspensivo” y condena al Ayuntamiento de Adeje en costas.

Etiquetas
stats