Cibercoches y robots futbolistas se reúnen en el Museo Elder
Los sistemas para coches inteligentes que vean en circunstancias complejas o detecten obstáculos invisibles para el conductor ya están inventados y serán presentados en el Congreso Eurocast 2007, aunque habrá que esperar a que sean rentables antes de integrarlos en vehículos comerciales. El catedrático y coordinador del encuentro Roberto Moreno, destacó que en esta undécima edición se mostrará al público los avances del “cibercoche” y de un equipo de fútbol de pequeños robots que, además, se alzaron con la copa de la competición Robocup europea.
El Congreso, que se celebra desde este lunes en el Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología de Las Palmas de Gran Canaria, tiene programada una docena de sesiones agrupadas en cuatro áreas que abarcan desde cuestiones muy abstractas y hasta trabajos más prácticos, explicó. Es el caso de la reunión del Grupo Europeo de Cibercars, encargado del programa Cibercar II, del que habrá una demostración a cargo los representantes del Instituto Automático Industrial del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Roberto Moreno considera que “lo más espectacular” de las innovaciones que se darán a conocer en este congreso internacional, así como la que mayor incidencia tendrá en la vida cotidiana, serán los sistemas de ayuda a la conducción, tanto que una de las conferencias se titulará Los conductores, para qué sirven. Se trata de sistemas que detectan automáticamente los límites de velocidad y reducen la marcha del vehículo, ayudas para la visión en condiciones difíciles y alarmas para no salirse de la carretera, de modo que ante un despiste del conductor se logre un “comportamiento inteligente” del coche.
En cuanto al momento en el que esté al alcance de los conductores, dependerá de que sea rentable, aunque detrás del proyecto se encuentra un fabricante europeo, avanzó.
“No habrá ni choques, ni infracciones de tráfico, ni excesos de velocidad, ni nada”
El director del Mueso Elder de la Ciencia y la Tecnología, Jacinto Quevedo, agregó que no más allá de cinco años los GPS funcionarán a la inversa y, además de recibir información, emitirán datos y el conductor será informado de posibles sanciones, la existencia de coches a gran velocidad que lo pueden implicar en un accidente y otros obstáculos. “En el futuro, la conducción será totalmente controlada por satélite y sensores, y no habrá ni choques, ni infracciones de tráfico, ni excesos de velocidad, ni nada”, exclamó.
Como curiosidad, los visitantes del Museo tendrán a su alcance la posibilidad de jugar un partido de fútbol de robots, que además realizarán esta semana una demostración de valses vieneses, pues son austríacos, y otra de isas, baile típico canario. Quevedo garantizó la diversión que ofrecerán estos pequeños robots, que en los descansos del partido harán de animadoras.
Roberto Moreno añadió que otro de los asuntos que serán tratados durante esta semana será la visión artificial por computador, utilizada para resolver cualquier problema a través de la vista, ya sea en una cadena de producción, en biología o en la detección, por ejemplo, de fallos en pieles imperceptibles para la vista humana pero evidentes para una máquina. La seguridad virtual, en la que el reto es la verificación formal de los programas y “estar seguro de que no falle alguna vez”, los avances en telefonía móvil, a cargo de un grupo procedente de Sidney, y las computadora aplicadas a la biología o las ciencias sociales serán otros asuntos que se tratarán en Eurocast.
El encuentro tiene carácter bianual y reúne a doscientos expertos de diversas modalidades cibernéticas llegados de Alemania, Austria, Italia, Estados Unidos, Japón, Australia y Corea, entre otros.