La polémica puesta en venta del Museo del Flamenco
SEVILLA, 26 (EUROPA PRESS)
Tras el anuncio aparecido este miércoles en el portal inmobiliario idealista.com, en el que Cristina Hoyos pone a la venta este espacio abierto en 2006 por un precio total de 5.997.000 euros, la polémica está servida. La consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, Rosa Torres, salio al paso señalando que “espera que el anuncio de venta del Museo del Baile Flamenco sea más que un fin una llamada y que encuentre respuesta para que el Museo no desaparezca”.
En declaraciones a los medios, Torres señaló que “el Museo tiene buenas cifras de viabilidad, por lo que espero que esto sea una llamada y no un fin que pueda afectar al patrimonio de Cristina Hoyos, un patrimonio que ha conseguido bailando a lo largo de toda su carrera”. “Sé que Cristina está muy triste porque había apostado por este proyecto personal, y no quería llegar a esta situación”, manifestó.
Además, la consejera informó que tanto la Consejería de Cultura, como las de Innovación, Ciencia y Empresa y la de Turismo, Comercio y Deporte estaban al tanto de la venta del Museo, “de la misma manera”, aseguró, “que todos estuvimos apoyando esta iniciativa empresarial que partió de una vocación de legar a su Sevilla natal parte de lo que la ciudadanía le había dado a lo largo de su carrera y le sigue dando”.
Asimismo, Torres no quiso “entrar en detalles” sobre si el Museo tendrá que devolver las subvenciones que le fueron concedidas. Al respecto, apuntó que “estuvimos animándola desde el principio porque nos pareció un equipamiento que colabora en la difusión de los valores del flamenco” y puntualizó que “como empresa se presentó a los incentivos que la Consejería de Innovación tiene a disposición de las mismas, siguiendo el procedimiento establecido, y por el que le fue aprobada una subvención que es también una relación contractual entre la empresa y las administraciones”.
“Más allá de entrar en detalles, que yo en este momento desconozco, sé que se deben a ese contrato y las gesticulaciones que figuren en ese contrato serán las que habrán de cumplirse”, añadió.
En este sentido, Torres también afirmó que “la Consejería de Cultura puso a disposición de este proyecto, como pone a disposición de todos los proyectos empresariales que estén relacionados con la industria cultural, los préstamos reintegrables”, sobre los que dijo, “soy consciente de que ellos los han estudiado”; pero, aclaró, “las decisiones no las toma la Consejería de Cultura, las toma la empresa”.
