Tomás Marco: “Los recortes a la cultura van a ser muy malos a la corta y mucho más a la larga”
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El compositor Tomás Marco acaba de cumplir 70 años y con este motivo, la Fundación Autor de la SGAE y el Centro Nacional de Difusión Musical le rinden homenaje con un concierto el 8 de octubre en el Auditorio 400 del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía a cargo de la Camerata del Prado, dirigida por Tomás Garrido. Esta formación interpretará un monográfico con cuatro obras del compositor madrileño, todas ellas pertenecientes a las dos últimas décadas.
En declaraciones a Europa Press, Marco ha mostrado su “agradecimiento” hacia los organizadores de este homenaje en un momento delicado para el mundo de la cultura. “Los recortes a la cultura van a ser muy malos a la corta y mucho más a la larga”, asegura. “El problema no es que no haya recortes, pues se puede ahorrar mucho en gastos superfluos y en cosas en las que se tiraba el dinero. Pero me temo que muchas de ellas seguirán permaneciendo y, en cambio, se va a optar por un rasero igual para todos que puede ser la muerte de muchas cosas importantes”.
Marco se refiere a la creación de “una red de orquestas”, por ejemplo, “que debería mantenerse”. “Hay que tener cuidado con esto porque igual hacemos una poda indiscriminada”, ha alertado.
Respecto a la subida del IVA del 8% al 21%, el compositor la ha calificado de “estupidez”. “El IVA cultural no va a reportar dinero y, en cambio, se puede cargar muchas cosas, como el teatro y los conciertos”, asegura.
UN ORGANISMO PROMOTOR
A pesar de todo ello, el panorama creativo en el campo musical atraviesa uno de sus mejores momentos: “En las actuales generaciones de compositores hay una gran cantidad de ellos que son de primera categoría y se les está reconociendo en el extranjero”, indica.
Sin embargo, hay también algunos puntos débiles: “En España son menos conocidos y reconocidos que fuera y nuestra defensa oficial exterior de la música no existe, no hay ningún organismo que se dedique a eso como sí lo tienen los escritores a través del Cervantes, las Bienales para los pintores o el cine, con un plan de ayudas importante”, recuerda.
A este respecto, Marco apunta que lo que se ha hecho fuera por parte de los compositores españoles, “que ha sido mucho”, se lo ha labrado “cada uno por nuestra cuenta”.
Es por ello que considera que la música sigue siendo la “hermana pobre” de la cultura, “incluso a nivel educativo”. “No se puede entender que las escuelas de Bellas Artes hayan pasado a la Universidad hace años y la música no”, afirma.
A lo largo de su extensa carrera, Tomás Marco ha tocado prácticamente todos los géneros (ópera, música de cámara, sinfonía, música coral). “Cada momento me ha dado satisfacciones”, confiesa aclarando que para un compositor “es muy difícil elegir entre sus obras”. “Siempre lo que más me ha interesado era lo que tenía entre manos en cada momento. Pero echando la vista atrás ve uno que hay una serie de obras que no están nada mal”, asegura.
Es el caso de sus Sinfonías, “que forman un buen corpus”; también alguna ópera como 'El caballero de la triste figura' que dentro de unos días se representará en México; y otras músicas, como el primer Cuarteto, “mi primera obra que se grabó en disco”, recuerda.
CIERTA INDEPENDENCIA
Si algo considera haber aportado al panorama musical es “una cierta independencia de estilos y escuelas”. “En realidad siempre he hecho lo que quería hacer y no me he preocupado mucho de si estaba o no a la moda. Todo mi catálogo obedece a un estilo que es el mío”, señala.
Preguntado por la escasez de óperas de autores españoles que se estrenan en nuestro país, Tomás Marco lo achaca a que los compositores “se empeñan en hacer obras enormes para los grandes coliseos, como el Liceo o el Real, que no están nada interesados en el tema, mientras que yo he optado por obras de tipo medio que tienen quizás menos medios pero son más fáciles de adaptar a otros escenarios, y en ellos ha circulado. Yo me siento contento de ellas”, declara.
Marco recuerda también otras facetas suyas más dedicadas a la gestión, como su paso por el INAEM como director general: “Fue una etapa de organización que alguien tenía que hacer y si lo hace un profesional del medio mucho mejor. Ahora le toca a otros. Estoy contento de aquello pero en estos momentos estoy centrado en mi labor compositiva”, señala.
Después de acabar recientemente su décima sinfonía, titulada 'Infinita' ahora trabaja en algunos proyectos de cámara, como una obra con textos diversos, desde San Juan de la Cruz hasta poetas modernos, en torno al crepúsculo, que llevará por título 'Aunque es de noche', un trabajo para barítono, violonchelo y piano. También tiene “alguna otra obra pequeña en el horizonte”, pero si le encargasen mañana una “obra gordísima” la haría, “por supuesto”.
Marco no es de los que se quejan por este asunto de los grandes encargos: “Me satisfago de lo que voy haciendo. Uno no puede aspirar a todo. Lo que hay que hacer es trabajar y no quejarse”, concluye.