El Gobierno pretende disminuir la burocracia, el intervencionismo y flexibilizar la economía

El Consejo de Gobierno de Canarias aprobará previsiblemente este martes un “paquete de medidas” destinadas a “disminuir la burocracia” y agilizar los trámites de control a las empresas con la meta de “flexibilizar la economía” ante la crisis, anunció este lunes su vicepresidente, José Manuel Soria.

Entre dichas medidas, “por ejemplo, en el ámbito de la Consejería de Economía y Hacienda hay algunas destinadas a flexibilizar los controles financieros, sin merma alguna del control de legalidad”, aseguró Soria en Las Palmas de Gran Canaria, donde se reunió con la Junta Directiva de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE) para analizar la situación de crisis actual.

Una cita que el vicepresidente y consejero de Economía y Hacienda del Ejecutivo subrayó que se enmarca en una ronda de contactos que su departamento ha promovido desde meses atrás a fin de tratar de acordar con la patronal iniciativas que contribuyan a paliar o afrontar los efectos del mal momento económico.

Merced a esa comunicación, “los empresarios están siendo muy activos en cuanto a la propuesta de medidas, de orientaciones y de directrices” que el Gobierno puede asumir a tal fin, aseguró.

“Disminuir la burocracia, el intervencionismo y flexibilizar la economía” es, según explicó, el objetivo de sus propuestas.

Añadió que, recogiendo su contenido, el Ejecutivo ha preparado ya medidas en aplicación de las cuales, “por ejemplo, se va a pasar, a partir de mañana, del control previo a una fiscalización permanente para agilizar tramitaciones”.

“También -prosiguió- se va a permitir que, en determinadas peticiones y planteamientos por parte de las consejerías para constatar si una empresa está o no en el registro de contratistas de la Comunidad Autónoma, se pueda hacer de manera directa, sin necesidad de pedir la certificación prevista a la Consejería de Economía y Hacienda”.

“Y así otro tipo de medidas que, insisto, llevan el marchamo, el sello, de lo que han sido los planteamientos, las demandas y las reivindicaciones, tengo que decir que justas y legítimas, de los empresarios”, concluyó el vicepresidente.

Una autoridad cuyo encuentro con la directiva de la CCE agradeció el presidente de la patronal de Las Palmas, Sebastián Grisaleña, quien dijo que la Confederación de Empresarios “no puede estar al margen de la situación que existe en este momento, no digo ya en Canarias sino a nivel mundial”.

El dirigente empresarial matizó que su intención ante la crisis no es pedir soluciones a sus propios problemas particulares al Gobierno, ya que -dijo- “el empresario ya es mayor de edad, sabe valorar las situaciones que están existiendo en cada momento y que esto son ciclos”.

Admitió, en todo caso, que “este ciclo nos ha cogido, digamos, más desprevenidos y es más largo en el tiempo”.

“Pero -apostilló- tenemos que tener la imaginación suficiente, junto con los sindicatos y el propio Gobierno, autonómico y central, para intentar mitigar de la mejor manera posible esta situación, porque la preocupación que tiene la Confederación no es solamente el aspecto económico, sino también el del desempleo”.

Grisaleña confió, pese a todo, en la ayuda que para afrontar la crisis puedan prestar las administraciones públicas.

“Yo diría que no solamente el Gobierno canario, sino el Gobierno central, ambos están preocupados, cada uno en su estilo y sus competencias”, señaló al respecto.

“Por tanto, todos estamos preocupados y todos inmersos”, fue su conclusión.

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