Suárez Gil dice que Gran Canaria sin tren ''se convierte en una isla menor''
“O Gran Canaria tiene su tren o se convierte en una isla menor”. Así de tajante se mostró este viernes el vicepresidente de la Cámara de Comercio de Las Palmas, José Miguel Suárez Gil, en referencia a la falta de partida en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2009 para la instalación de un tren en Gran Canaria.
Suárez Gil insistió en la posición de la Cámara a favor del tren porque “necesitamos un transporte alternativo rápido” que conecte el norte con el sur de la Isla. En este sentido, recordó que en estos momentos de crisis “sólo el sector turístico es el que tira” de la economía, por lo que “hay que ayudar al sur”.
Por ello, dijo, “a Gran Canaria no se le puede seguir agrediendo y haciéndole daño” defendiendo “sólo coches” en la isla.
Falta de ingresos
El vicepresidente de la Cámara de Comercio de Las Palmas destacó que el Gobierno central “tiene la falta de ingresos que están teniendo muchas comunidades autónomas y la nuestra en especial”, lo que se refleja en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el próximo año.
“Me parece muy mal la rebaja” en la inversión para Canarias que se da en los PGE, dijo, aunque señaló que ya “protestará lo que tenga que protestar” el Gobierno de Canarias e insistió en que el Gobierno central “no está repartiendo riqueza porque no la habrá” debido a que “decrecen los ingresos”.
En este sentido, resaltó que 2009 “será un año altamente complicado” y que la crisis todavía durará unos tres años más. Para Suárez Gil, “todo ha venido con una velocidad terrible” por “falta de previsión” al haberse hablado de desaceleración en lugar de crisis.
“En países civilizados como el nuestro, no se puede dejar de olvidar que recesión es más de dos trimestres de decrecimiento” y encontrarnos con que “hemos pasado de desaceleración a recesión sin pasar por el purgatorio de la crisis”, señaló.
Desde la Cámara se recordó que Canarias ya ha pasado por tres crisis anteriores y siempre se ha dado la misma salida: “apretarse el cinturón y atenernos a los recursos que tenemos”. “Pero llevamos mucho tiempo sin decir la verdad y hay que abordar estas cosas de cara”.
Por ello, dijo, “sin echarle la culpa a nadie: las cosas son como son y vienen como vienen”, así que “no se puede seguir con programas que no se pueden pagar” y se tiene que dar un “cambio de actitudes: hemos hablado de bienestar, calidad de vida y grandes programas sociales”, pero ahora empresarios, sindicatos y administración tienen que hablar de “rendimiento y productividad”, apuntó.
Además, el sector bancario también “tiene que estudiar un montón de cosas”. Según Suárez Gil, de la última crisis “pudimos salir por la liquidez que tenía la banca, pero ahora no tiene”, por lo que “no le va a quedar más remedio que echar una mano al empresariado”.
De todos modos, resaltó que “Canarias no le tiene miedo a la crisis”. “Lo que nos preocupa es qué decisiones se toman para poder salir”, apostilló.