Trabajo no ve necesario subir el periodo de cálculo de la pensión a 25 años
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, no ve “necesario” elevar de 15 a 25 años el periodo de tiempo que se utiliza para calcular la pensión pues, según dijo, “los mismos efectos” que conllevaría esta medida “se pueden conseguir técnicamente con otras fórmulas”.
Granado, en declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, subrayó que los efectos que se conseguirían subiendo a 25 años el periodo de cálculo de la pensión “no serían en ningún caso de ahorro de gastos”, como se ha apuntado desde algunos sectores, ya que, si fuera así, el haber elevado este periodo desde los dos a los quince años habría supuesto a la Seguridad Social un ahorro de 7 puntos del PIB, cosa que no ha sucedido, puntualizó.
El secretario de Estado señaló que lo debe hacerse es buscar un procedimiento de cálculo de la pensión que no perjudique a los trabajadores despedidos al final de su vida laboral y que, al mismo tiempo, “anime a la gente a hacer buenas carreras de cotización”. Dicho sistema, dijo, no puede permitir tampoco seleccionar algunos años de vida laboral (los mejores) para generar mayores prestaciones y debería definir la prestación “según lo aportado en los periodos más amplios de la vida” del trabajador.
Granado explicó además que el aumento de dos a quince años del periodo de cálculo llevado a cabo entre 1985 y 1997 “no ha tenido efectos negativos en la pensiones” ni ha supuesto una modificación en el gasto. De hecho, precisó, esta medida ha supuesto “ventajas” para los ingresos del sistema, pues ha permitido estabilizar las carreras de cotización y porque ha impedido lo que se denominaba 'compra de pensiones', es decir, concentrar durante dos años una cotización muy elevada para, con menores aportaciones, generar mayores pensiones.
Respecto al Programa de Estabilidad que contenía la referencia a un periodo de cálculo de la pensión de 25 años, referencia que el Gobierno alegó que era un “ejemplo” y que fue eliminada finalmente del texto, Granado afirmó que el Ministerio de Trabajo, y concretamente la Seguridad Social, coparticipó con Economía en lo que es la parte presupuestaria de la Seguridad Social, pero “no en la literatura”. “No conocía la literatura que lo acompañaba”, admitió.
REFORMAS “VALIENTES”.
En cualquier caso, el secretario de Estado subrayó que España necesita reformas en la Seguridad Social porque su población “va a envejecer muy deprisa en los próximos 20 años”. “Ahora pagamos 8,5 millones de pensiones y dentro de 30 años vamos a pagar 15 millones de pensiones. Y como ahora estamos en buena situación, es el momento de emprender reformas y hacerlo en un periodo suficientemente largo para que no haya agravios comparativos entre los que vean sus prestaciones reformadas y los anteriores”, explicó.
Granado indicó que, aunque se está consiguiendo retrasar la edad efectiva de jubilación (ahora está por encima de los 63 años), “llegará un momento en que eso no será suficientemente”, porque el envejecimiento de la población será mucho más intenso que la capacidad económica del sistema para mantener buenas prestaciones.
“Y como lo que queremos es mantener las pensiones en crecimiento, para gobernar ese impacto en el gasto público, es necesario hacer una reforma de forma paulatina, aprovechando los ahorros del Fondo de Reserva, que deben ser utilizados en ese periodo transitorio, para que dentro de 30 años la situación sea tan buena como ahora”, subrayó.
Preguntado por el rechazo sindical a los planteamientos del Gobierno, Granado afirmó que él habla con los responsables sindicales de Seguridad Social diariamente y lo que percibe en ellos “es un enorme deseo de llegar a acuerdos”. “Las turbulencias económicas deben animarnos a llegar a esos acuerdos, todavía con más vigor”, añadió.
FEBRERO EMPIEZA GANANDO AFILIADOS.
El secretario de Estado señaló que, con la presentación de estas propuestas, “el Gobierno está haciendo lo que debe hacer”. Lo que pasa, admitió, “es que eso provoca una cierta pertubación social, porque, como decía San Ignacio de Loyola, la gente prefiere en tiempo de aflicción no hacer mudanza”. En este sentido, subrayó que la tradición española es la de salir de la crisis con reformas y consideró que dichas reformas deben ser “valientes”.
Por otro lado, y para “dar buenas noticias”, Granado informó de que la la afiliación a la Seguridad Social va a tener un comportamiento “muchísimo mejor” en el primer trimestre de 2010 que en igual periodo de 2009.
De hecho, dijo, en la primera semana de febrero del año pasado se perdieron más de 60.000 afiliaciones, mientras que en la de este año se han ganado cotizantes.