Las organizaciones agrarias aceptan suavizar algunos controles para facilitar la entrada más rápida de papa de semilla británica
Las organizaciones profesionales agrarias de Canarias, Asaga-Asaja, COAG, UPA y Palca-Unión de Uniones, se han puesto de acuerdo en una medida que, según el escrito que ya han remitido por registro a la Consejería de Agricultura del Gobierno autonómico, mejorará la rapidez y hará más fácil la llegada a las islas de papa de semilla con origen en Reino Unido, el país clave en el suministro de ese producto a los agricultores del archipiélago.
La medida consiste en permitir que esa papa de semilla pueda entrar en Canarias con hasta el 1% de tierra adherida al tubérculo (lo fijado por la normativa de la UE), en vez de solo el 0,5% (el umbral de la instrucción del MAPA). Este acuerdo se adopta por el sector agrícola local, por sus representantes, tras el desbloqueo la semana pasada de las importaciones de papas (consumo y semilla) desde ese país (el comercio se cerró por problemas fitosanitarios en origen, la presencia de un brote de escarabajo) y atendiendo al cumplimiento de una batería de medidas específicas de control fitosanitario definidas previamente en una instrucción del Ministerio de Agricultura (emitida el miércoles de la semana pasada, en consenso con la Consejería de Agricultura y previa consulta al sector productor).
Esta instrucción establece el 0,5% de tierra, porcentaje que ahora aceptan las OPA que alcance el 1%, para así agilizar la llegada de la semilla y para facilitar la logística de ese comercio con Canarias desde Reino Unido, también tras las quejas de los operadores británicos, que veían inviable la aplicación del otro porcentaje y ello ya ha retrasado la entrada de papa de semilla.
Con esa acción colectiva del sector, se espera que las importaciones de papa de semilla se aceleren, para poder cumplir con las cosechas de extratemprana (con cosecha para la primavera) y de temprana (en el verano). Estas son las dos cosechas más relevantes en Canarias, con volúmenes medios en torno a los 60 millones de kilos. La exportación de papa desde Reino Unido a Canarias en sacos metidos en contenedores puede tardar una semana y media.
Lo que está claro y todo el mundo reconoce es que, si la papa de semilla británica no llega, Canarias casi se queda sin cultivo, y eso se quiere impedir; ahora bien, siempre aplicando las máximas medidas de control en frontera para evitar que el brote de escarabajo de Colorado detectado en Kent, condado de Inglaterra, termine recalando en las islas. Estos controles son los de la instrucción, con la rebaja ahora planteada.
Según se explica en el escrito trasladado al consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ejecutivo de Canarias en el día de hoy, “en lo que respecta a la obligación de que las papas sean sometidas a un procedimiento de limpieza, mediante cepillado y/o lavado que permita la eliminación total de restos de tierra y de organismos nocivos, el máximo de tierra aceptable sería del 0,5% (recogido en la instrucción del MAPA). No obstante, sobre esta exigencia, algunos proveedores de papa de siembra de Reino Unido, al parecer, han trasladado la enorme complejidad que implica su aplicación, mostrando su negativa a la exportación a Canarias bajo estas condiciones, por considerar que sus territorios y productos se encuentran lejos de las zonas de riesgo, a lo que se sumaría el consiguiente miedo al rechazo de mercancía debido a esas restricciones en el porcentaje de tierra”.
Para evitar los problemas de suministro
El documento admite que, “si se confirmase la negativa a la exportación de papa de siembra de los proveedores de Reino Unido, habría graves problemas de suministro de papa de semilla en la nueva campaña, de 2024, lo que supondría graves perjuicios para los productores canarios. En este contexto, se considera necesario la adopción de decisiones que contribuyan a resolver la problemática para la importación de papa de semilla, sin que ello suponga un mayor riesgo de entrada del escarabajo y cumpliendo escrupulosamente la limpieza que especifica la Orden del 12 de marzo de 1987”.
A continuación, se añade en el mismo texto: “A la vez que se solicita la aplicación de la normativa europea vigente en cuanto al porcentaje de tierra o impurezas autorizadas (el 1% de tierra en la papa) para los proveedores de zonas alejadas de la afección, lo que puede facilitar la importación de papa de semilla, se demanda a las administraciones competentes que sean especialmente exigentes y estrictas en la aplicación del conjunto de medidas adicionales planteadas para esta situación extraordinaria, entre las que se incluye el ensacado en sacos nuevos y de no más de 25 kilos en papa de semilla, la aplicación de una certificación de la trazabilidad real que garantice la correcta identificación del origen y un refuerzo en los medios materiales y humanos para garantizar el control y revisión del 100% de las papas importadas desde Reino Unido”.
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