Al Maliki niega que haya cárceles secretas en Irak
MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, ha negado las informaciones que acusan a Irak de torturar y de abusar de detenidos en una prisión secreta. “No hay cárceles secretas en Irak”, aseguró durante una entrevista con la televisión Al Iraqiya.
Las acusaciones de tortura y abusos en la cárcel Muthanna fueron reveladas en primer lugar por el diario 'Los Angeles Times' el 19 de abril, una información que hizo que la organización Amnistía Internacional (AI) pidiera a los responsables iraquíes que investigara las acusaciones.
Además, la organización pro Derechos Humanos Human Rights Watch (HRW) afirmó que los detenidos son golpeados de forma rutinaria, así como sometidos a descargas eléctricas y son sodomizados por los encargados.
Al Maliki aseguró que no era una cárcel secreta y afirmó que las informaciones son “una campaña difamatoria en la que las embajadas y las diferentes organizaciones de los medios de comunicación toman parte, y está perpetuada por los políticos iraquíes, porque sirve a sus intereses para decir que hay cárceles secretas”.
El primer ministro aseguró que la instalación en Muthanna no era secreta, sino que era de dominio público y contaba con siete jueces trabajando en ella, recoge la CNN. A pesar de esto, Al Maliki reconoció que hay un pequeño número de casos de abusos en las cárceles, pero indicó que sucede en todas las partes del mundo.
El primer ministro señaló que sabe que algunos miembros del Parlamento habían visitado la instalación y que instruyeron a los presos para que hiciesen acusaciones falsas sobre la tortura y para que se hicieran a sí mismos cicatrices.
El informe de HRW se basa en las entrevistas a 42 presos que habían sido retenidos en la instalación secreta en el aeropuerto de Muthanna, en el oeste de Bagdad, desde finales de 2009. Los hombres están entre los 300 detenidos que fueron transferidos en las últimas semanas a otro centro de detención después de que se revelara la existencia de esta cárcel, según indicó el informe de HRW.