Ouattara: “Ningún crimen quedará sin castigo”
ABIYÁN,12 (Reuters/EP)
El presidente de Costa de Marfil, Alassane Ouattara, ha prometido este jueves que “ningún crimen quedará sin castigo” tras los cinco meses de enfrentamientos entre sus partidarios y los defensores del ex presidente Laurent Gbagbo, al tiempo que ha decretado tres días de luto en memoria de las víctimas de este conflicto.
En un discurso ante sus ministros en los jardines del palacio presidencial, Ouattara ha dejado claro que Costa de Marfil no sufrirá “nunca más” el baño de sangre de los últimos cinco meses. “Os doy mis garantías de que ningún crimen quedará sin castigo”, ha asegurado el mandatario, antes de que las fuerzas militares arriaran la bandera nacional marfileña al son de la música interpretada por la banda castrense.
Ouattara ha declarado el 12 de mayo como el día de los “mártires” del conflicto y ha recordado que ya se ha creado una comisión nacional de investigación “para perseguir y juzgar a los autores de atrocidades y asesinatos”.
Costa de Marfil se sumió en una etapa de violencia tras las elecciones presidenciales del pasado 28 de noviembre, en las que resultó vencedor Ouattara, candidato opositor, pero Gbagbo se negó a entregarle el poder hasta que fue detenido el pasado 11 de abril. Ouattara finalmente juró como presidente del país la semana pasada. El conflicto entre los partidarios de Ouattara y Gbagbo ha dejado al menos 3.000 muertos y más de un millón de desplazados.
“Nosotros, los supervivientes, recordamos a los mártires y a todas las víctimas de esta crisis. Debemos parar para llorar por esos miles de familias desconsoladas y tristes”, ha asegurado Ouattara.
El presidente saliente fue detenido por las fuerzas de Ouattara el pasado 11 de abril, aunque las milicias que le apoyan continuaron perpetrando asesinatos hasta la semana pasada, según el Ministerio de Defensa. El Gobierno de Ouattara ha iniciado un proceso legal contra Gbagbo por supuestos crímenes de guerra, una decisión que podría entrar en conflicto con su promesa de llevar la reconciliación al país africano.
Los grupos defensores de Derechos Humanos también han acusado a las fuerzas de Ouattara de cometer abusos y ejecuciones extrajudiciales, incluidas las muertes de unas 1.000 personas en el oeste del país.
Los grupos de Derechos Humanos han incidido en que aunque estos asesinatos no fueron tan sistemáticos como los cometidos por las fuerzas leales a Gbagbo, sus responsables deben ser llevados ante la justicia.
El Ministerio de Defensa marfileño ha acusado esta semana a los milicianos leales a Gbagbo de haber matado a 120 personas durante su retirada desde Abiyán, en la que aplicaron la táctica de 'tierra quemada'. La Misión de Naciones Unidas en Costa de Marfil (ONUCI) ya ha anunciado que investigará estos hechos.
En su discurso de este jueves, el presidente Ouattara ha reiterado que planea crear una comisión para la verdad y la reconciliación al estilo de Sudáfrica y ha confiado en que esta iniciativa permita a su país superar la etapa de violencia. “La comisión de la verdad y la reconciliación que nacerá pronto permitirá a toda la nación entender y determinar responsabilidades y nos dará el poder de perdonar”, ha dicho.
Una investigación de Naciones Unidas ha confirmado esta semana la muerte de 68 personas a manos de las fuerzas de Gbagbo en el distrito de Youpougon en Abiyán el día después de que fuera detenido el presidente saliente. Los cuerpos de los fallecidos fueron enterrados por sus familiares en un campo de fútbol.