“Mi sueño es ver una Palestina independiente antes de morir”
Su sueño es ver una “Palestina independiente antes de que me vaya de este mundo”. Ahmad Abdel, vicepresidente de la comunidad palestina en Canarias, es natural de Nablus y reside en La Palma desde hace casi 40 años. “Tuve que emigrar de mi país en tiempos de la guerra del 67 porque mataron a mi padre en un toque de queda; él fue el primer muerto que cayó víctima del ejército israelí en Nablus”, ha recordado con tristeza a LA PALMA AHORA.
Ahmad Abdel, más conocido por Tony El Palestino, es un comerciante de Santa Cruz de La Palma, muy querido y reconocido socialmente, que contempla con gran preocupación los acontecimientos que se están sucediendo en la Franja de Gaza. “Han matado ya a más de 2.000 personas, que se dice pronto; es un genocidio de Israel contra el pueblo palestino y la comunidad internacional también tiene parte de responsabilidad, está haciendo muy poco; se habla mucho de Gaza y del pueblo palestino pero nadie hace nada”, se lamenta.
Su ilusión el lograr “un Estado palestino independiente, las tierras que teníamos en el 67, con Jerusalén Oriental como capital”. “Solo queremos vivir en paz, que nuestros hijos puedan entrar y salir, jugar; que puedan decir que pertenecen a un Estado, porque a mí cuando me preguntan a dónde voy, no lo sé, no sé si voy a Palestina o a Israel”, se queja. “Antes de que me jubile, o desaparezca de este mundo, quiero que cuando me pregunten a dónde voy, pueda decir que a Palestina, a mi país”, insiste.
Asegura que “mi sueño sigue siendo que Palestina sea un Estado independiente y que podamos vivir en paz”, pero no tiene demasiada confianza en la comunidad internacional y ninguna en el Gobierno norteamericano. “EEUU siempre ha sido pro israelita, en las conversaciones de paz se ha puesto de parte de Israel; no podemos contar con nadie, el problema palestino lo tenemos que resolver los propios palestinos”, sostiene.
Ahmad Abdel está plenamente integrado en La Palma. “Tengo mujer y dos hijos palmeros”, dice, pero le quita el sueño su familia palestina. “Allí tengo dos hermanas y dos hermanos, sobrinos, y también mi casa; solo puedo verlos cada tres o cuatro años, cuando me dan un permiso de un mes”, explica. “Nosotros estamos aquí con el corazón en un puño, así que imagínate cómo pueden estar ellos, sin trabajo, sin ilusión”, relata. “Este lunes hablé con mi hermano y me dijo que lleva un mes sin salir de casa, que no puede ir ni a Ramala ni a ningún sitio”, añade.
La Palma y Canarias “es nuestra tierra querida y desde aquí quiero tener un recuerdo para todas las víctimas que han caído y para sus familiares; estamos con ellos”, comenta con emoción.
En su establecimiento de ropa vaquera de Santa Cruz de La Palma, cerca de La Alameda, Ahmad Abdel vende el tradicional pañuelo palestino para apoyar a su pueblo. “Hay ya muchos muertos, mutilados y desplazados, y Gaza es una cárcel”, concluye.