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Una lata de cerveza rusa y un bote de suero de EEUU en el callao de Nogales

La Palma Ahora

Puntallana —

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“Lo conseguimos”, afirma con entusiasmo Gustavo Díaz, artista y activista medioambiental, que ha logrado movilizar a un grupo de personas voluntarias para limpiar el callao de Nogales, en Puntallana, un enclave marino al que arriban, arrastrados por las corrientes, residuos de otras latitudes. “Es una gran noticia, porque también libramos de residuos del cauce del barranco”, destaca. 

“Encontramos todo tipo de envases plásticos, botellas, bidones, cajas plásticas de todos los tamaños, cuerdas, boyas, calzados muy variados, un trozo de zodiac enorme, aperos de pesca, neumáticos, cintas y tubos de PVC; entre las curiosidades, una lata de cerveza rusa, un bote de suero de Estados Unidos, una boya baliza gigante y también una radio baliza de embarcación. Lo peor fue encontrar una pardela muerta”, lamenta. 

“Muy interesante la cantidad de madera de troncos pulida, con tonos rojizos, ideales para talla o tornería. Alucinante. El resto de maderas de palés y demás los depositamos, para usos de ocio, en la cueva o refugio”, explica. 

“También el estado del mar dio una tregua y conseguimos obtener imágenes de los fondos marinos más cercanos y la buena noticia es que están limpios”, celebra. “Escucho muchas veces decir que ‘es imposible, hay que buscar otra fórmula’, pero mientras se debaten las soluciones, diría que pasan años y el residuo sigue varado en el mismo lugar”.

“Cuando se trabaja la unidad, con un pensamiento colectivo, somos muy diferentes y podemos hacer mucho”, recalca Gustavo, quien se muestra “enormemente agradecido y convencido de contar con el mejor equipo para estas actuaciones. La conexión y coordinación es total, personas con mucho talento y capacitación, conectados con nuestra isla, determinantes, con ese sentido de pertenencia. Un gran equipazo de voluntariado”. 

“Lo que marca la diferencia es ver una maquinaria bien engrasada funcionando: personas, administraciones, entidades, ayuntamientos y empresas cooperando en estos seis meses, de la mayor limpieza de caladeros de residuos de la isla”, recalca.

“Todas las personas necesarias para la actividad estaban en su puesto, contestando y devolviendo llamadas y gestionando esa aportación clave, detrás de esos teléfonos hay gente que hace lo que debe y son maravillosas”, insiste.

“Y claro que sí, Gesplan y sus operarios son la caña, implicación total, su apoyo es el complemento esencial, esa cercanía y su disposición con estas actividades es una garantía de premio. Estoy orgulloso de lo que hemos logrado juntos. Somos una ola en un barranco”, dice. 

En esta acción han colaborado el Ayuntamiento de Puntallana, Gesplan (Gestión y Planeamiento Territorial y Medioambiental SA), Consejería de Medio Ambiente Cabildo de La Palma, Reserva Mundial de la Biosfera La Palma, Área de Residuos del Cabildo de La Palma y Agencia Insular del Mar.

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