El superordenador ‘LaPalma’, apuesta estratégica de apoyo al Observatorio del Roque

El superordenador LaPalma, explican desde el instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), “es uno de los ocho nodos de la Red Española de Supercomputación (RES)”, y forma parte desde 2007 de “un sistema de superordenadores distribuidos por el territorio nacional, conectados con redes de alta velocidad y destinados a ofrecer una mayor capacidad de cálculo a la comunidad científica española”.

Su instalación en el Centro de Astrofísica de La Palma (CALP) fue “una apuesta estratégica para apoyar la actividad observacional en el Observatorio del Roque de Los Muchachos -sobre todo tras la incorporación del Gran Telescopio Canarias- y fortalecer además el desarrollo de las telecomunicaciones en la Isla”.

La Red Española de Supercomputación “está financiada por el Ministerio de Economía y Competitividad y se coordina desde el Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CSN), donde se encuentra instalado el MareNostrum, uno de los ordenadores más potentes de Europa. De hecho, el nodo LaPalma es parte de los antiguos equipos de MareNostrum”.

Los otros nodos de esta red están situados en el BSC-CNS, en la Universidad Politécnica de Madrid, en el Instituto Tecnológico de Canarias en Las Palmas de Gran Canaria y en las universidades de Cantabria, Málaga, Valencia y Zaragoza. Cada uno de estos superordenadores “puede intercambiar grandes cantidades de información, distribuir tareas y optimizar recursos a gran velocidad”.

Megamemoria

El superordenador LaPalma tiene “dos terabytes de memoria principal, lo que equivaldría a la memoria de más de 200 ordenadores domésticos”. Cuenta también “con 38,5 terabytes de disco duro para el almacenamiento de datos, tanta información como la de una biblioteca con más de 25 millones de libros, y opera en una sala de apenas 32 metros cuadrados”, destaca el IAC.

El superordenador está conectado “a la sede del IAC en Tenerife por cable submarino con un ancho de banda de 10 Gigabit/s (Gbps), de los que tiene garantizados al menos 1Gbps. A la hora de transmitir datos, el superordenador LaPalma es unas 10 veces más rápido que las conexiones de fibra de banda ancha domésticas”. Con LaPalma, las comunicaciones “se agilizan y se compensa el denso tráfico de información existente entre Canarias y la Península”.

Desde el IAC se apunta que “su arquitectura está basada en 256 blades (servidores con dos procesadores), un tipo de computadora para el procesamiento de datos que permite un considerable ahorro de espacio y energía”.

El consumo de energía de LaPalma, según el IAC, “es reducido: apenas requiere 85,5Kw de potencia, el equivalente a 855 bombillas de 100 vatios”.

La sala que acoge al supercomputador dispone de “un suelo técnico capaz de resistir un peso de 2.000 kilos por metro cuadrado. Cuenta además con sistemas alternativos para garantizar el suministro eléctrico y de frío, así como con funciones avanzadas de climatización, seguridad, monitorización y protección contra incendios. LaPalma se mantiene en la sala a una temperatura de 24 grados centígrados”.