El PP insta al Gobierno a tomar nota de una protesta que el PSOE cree que crispa y divide
Rajoy destacó la manifestación del pasado sábado como “un acto de afirmación y un acto de esperanza a favor de España, a favor de la libertad y a favor de la derrota del terrorismo” y dijo que espera que el Gobierno “tome nota”. Rajoy, que además calificó la protesta de “ejercicio de libertad” y de “ejemplo de civismo”, dijo que la manifestación “unió a la mayoría por encima de los partidos políticos” y que quedó claro que los españoles piensan que el Gobierno “se ha equivocado y tiene que rectificar” su política contra ETA.
“Fue un ejercicio democrático impecable, un ejercicio de libertad, fueron millones las personas que ejercieron un derecho constitucional, el derecho de manifestación y de reunión”, afirmó Rajoy. A su juicio, la manifestación “unió a gente que tenía formas de pensar distintas y a gente de muy diferente condición”.
Asimismo, anunció que acudirá con una “representación muy importante” de su partido a la manifestación que el Gobierno de Navarra ha convocado para el próximo sábado en Pamplona con el lema “Fuero y Libertad. Navarra no es negociable”. El líder del PP explicó: “Estamos ante un tema capital y quiero que Navarra sea lo que los navarros y los españoles quieren que sea”, dijo.
“El único peligro para España es la confrontación excesiva”
A este respecto, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, consideró “sorprendente” que un gobierno convoque a los ciudadanos “en base a mentiras, para ir contra otro Gobierno”. Blanco aseguró que “cada vez son más los españoles que piensan que hay que defender a España de un líder como Mariano Rajoy”, al que acusó de “dedicar todos sus esfuerzos” para crispar y dividir a los ciudadanos.
Blanco hizo estas declaraciones en rueda de prensa tras la reunión de la Comisión Permanente del PSOE, en la que se refirió a la manifestación convocada el pasado sábado por el PP en Madrid, de la que dijo que “nos trajo los inconfundibles aromas del pasado, que si se parecen a algo desde luego no es al centro político”. Tras insistir en que el Ejecutivo socialista hace la misma política penitenciaria que los anteriores, Blanco afirmó que para el presidente del PP “lo primero no es acabar con ETA, sino acabar con el Gobierno legítimo de nuestro país”.
Por parte del Gobierno, el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, consideró contradictorio que quienes ejercían su derecho a manifestarse, demostrando que en España hay libertad y democracia, gritaban al tiempo “que la libertad está secuestrada”. En cualquier caso, consideró “más importante” la conmemoración del tercer aniversario del mayor atentado terrorista de la historia de España y “que el homenaje a las víctimas coincida con su juicio”, en referencia al 11-M.
El presidente de la junta de Andalucía y del PSOE, Manuel Chaves, dijo que respeta el derecho de los ciudadanos a manifestarse pero que le preocupa “la posición del PP de la utilización de símbolos, de nominaciones y conceptos que pertenecen a todos los españoles”. El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, dijo que en la manifestación de Madrid se puso de manifiesto la “soledad” del PP, fruto de su “involución extremista” y recordó a este partido que el “cauce democrático” para investir a un nuevo presidente del Gobierno es la presentación de una moción de censura en el Congreso y no “investir a su candidato en la calle”.
El secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, instó al Gobierno a “tener en cuenta” la manifestación por el “sentimiento negativo en la calle” que ha provocado la concesión de la prisión atenuada a De Juana. Duran descartó que España esté en peligro y aseguró que “el único peligro para España es la confrontación excesiva entre PP y PSOE”.
