Cabildo grancanario señala que las declaraciones de los controladores “suena más a amenaza que a otra cosa”
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 4 (EUROPA PRESS)
El consejero de Turismo del Cabildo de Gran Canaria, Roberto Moreno, señaló hoy que cualquier declaración que realizan los controladores últimamente “suena más a amenaza que a otra cosa”.
De esta forma, se refirió Moreno a las negociaciones entre el Ministerio de Fomento y el sindicato mayoritario de los controladores USCA, que se rompieron esta semana. “Es curioso como cualquier declaración que venga del colectivo de controladores suena más a amenaza que a otra cosa”, indicó el consejero insular en declaraciones a Europa Press.
Agregó que para una Comunidad Autónoma como Canarias y para la isla de Gran Canaria, en particular, cuyo principal sector económico, que es el turismo, y para su vida diaria necesita del transporte en avión, la situación entre Fomento y controladores “es una desgracia”.
Sin embargo, se mostró a favor de la posición adquirida por el Gobierno central en la negociación del convenio. “Creo que la posición firme tanto de Aena como de Fomento es la que se tiene que tomar, no se debe ceder a ningún chantaje o a ningún aviso de que en Semana Santa puede haber problemas”, apuntilló.
En este sentido, apuntó que Semana Santa “es crucial” para Gran Canaria, ya que recordó que el pasado año esta isla fue la “única” que incrementó en sus cifras del sector turístico, la “única”, dijo, que “tuvo un efecto Semana Santa, todas bajaron, Gran Canaria creció”.
Asimismo, resaltó que fechas como Semana Santa, Navidad, invierno o los meses del verano “son esenciales para Gran Canaria”; por ello, indicó que el hecho de que avisen que “precisamente en Semana Santa puede haber problemas, suena más a amenaza que a aviso”, lo que subrayó “es inadmisible”.
Preguntado respecto a que los controladores aéreos se refugian en la planificación de Aena para justificar lo ocurrido la pasada Navidad en el archipiélago, Moreno indicó que el pasado año ya hubo en Gran Canaria un “aumento de movimientos” en Semana Santa, por lo que subrayó que “por mucho aumento que haya este año no va a ser un 10 por ciento más de la Semana Santa del año pasado y fue perfectamente asumible pero, claro, se junta la Semana Santa con la negociación del convenio”.
“Los que están negociando el convenio, hace un año no estaban negociando el convenio y todo salió bien y no hubo ni retrasos, todos los aeropuertos funcionaban como relojes. Este año se negocia el convenio y, de pronto, se anuncia que la planificación, que no debe ser muy distinta que la que se hizo el año pasado, que la planificación es mala y que va a ver retrasos. Suena a apretar tuercas y un poco de amenaza”, sentenció.