González y Plasencia no podrán acogerse a la amnistía fiscal
Los empresarios Ignacio González y Antonio Plasencia no se podrán acoger a la amnistía fiscal decretada por el Gobierno central con el objetivo de que aflore el dinero negro, después de que este lunes saliera publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la correspondiente normativa. Así lo hará valer ante los tribunales la acusación particular del caso de Las Teresitas, representada por los abogados Felipe Campos y Pedro Arcila.
La investigación llevada a cabo por la policía judicial y la Agencia Tributaria detectó que entre ambos poseían alrededor de 439 millones de euros sin declarar a Hacienda que ahora no podrán blanquearse. Y es que uno de los pocos requisitos que se imponen para permitir que aflore este dinero es precisamente que no haya sido objeto de ninguna investigación judicial. La medida podrá afectar también a los demás implicados en la trama que surge en torno a la operación de compra y venta de la playa de Las Teresitas, como son el exalcalde, Miguel Zerolo, actualmente senador por la Comunidad Autónoma, a quien se le supuso que había utilizado “grandes cantidades de dinero de origen desconocido”, o los hijos de los empresarios, Pedro González y Antonio Plasencia.
En el caso del presidente de la Cámara de Comercio de Tenerife, Ignacio González Martín, las investigaciones llevadas a cabo desde el año 2001 a 2006 determinaron que este empresario utilizaba el sistema de caja única, lo que implica el pago indistinto desde cualquier sociedad de su grupo y la existencia de “numerosos” movimientos internos entre las cuentas. Este sistema “posibilita el ennegrecimiento de grandes cantidades de dinero que podrían haber sido utilizadas en relación a los hechos investigados”, refleja la juez, Carla Bellini.
Así se llegó a contabilizar la existencia de hasta 423 millones de euros que salieron de las cuentas de González sin que se llegaran nunca a ser declarados. Incluso se detectó la compra de un edificio con el fin de blanquear parte del dinero. En el caso de Antonio Plasencia, presidente de la Federación de la Construcción (Fepeco), las cantidades contabilizadas ascendieron a algo más de 16 millones de euros.
La policía llega a relacionar la existencia de este dinero con posibles pagos al exalcalde, quien, durante todos los años analizados, apenas sacó fondos de sus cuentas bancarias.“Podría existir una conexión entre el dinero presuntamente ennegrecido por los empresarios y la ausencia de gastos de Zerolo, dado que, si no gasta de sus cuentas, el origen del dinero utilizado en estos períodos debería considerarse como desconocido”.
El actual senador, en su última declaración ante la juez, Carla Bellini, y la fiscal de Anticorrupción, María Farnés Martínez, dijo que no sabía de dónde había salido este dinero. “Preguntaré a mi mujer a ver si es que ha ahorrado algo”, se limitó a señalar. Pese a lo contundente de las conclusiones policiales, la magistrada determinó que “del resultado total de la investigación no ha quedado acreditado de una manera cierta e inequívoca la existencia de indicios que permitan sustentar la imputación de cohecho, toda vez que estamos en presencia de datos o circunstancias que términos de común experiencia no permiten otra cosa que la suposición o la mera sospecha”.
No obstante, la policía judicial y la Agencia Tributaria indicaron que debe estudiarse la posibilidad de que los imputados en esta trama hayan cometido un delito fiscal, motivo por el cual en teoría este dinero no podrá ahora acogerse a la amnistía puesta en marcha por el Gobierno dirigido por Mariano Rajoy.
Campos concluye que efectivamente ninguno de los implicados en la trama podrá beneficiarse de las medidas para que el dinero negro salga a flote. “El problema con el que se han encontrado los investigadores no es que no haya dinero negro, sino que no sabe si viene únicamente de Las Teresitas o de otras fuentes”, indicó. Arcila, por su parte, descarta que ni siquiera vayan a intentarlo. “Si han sido investigados o lo están siendo no les interesará sacar ese dinero a flote”.