El Parlamento iniciará el 16 de febrero el debate sobre la reforma electoral
El próximo 16 de febrero comienza el largo y tortuoso camino para modificar el sistema electoral que ha imperado en Canarias en los últimos 20 años (triple paridad más dos barreras de acceso al Parlamento: la del 6% regional y la del 30% insular), pues la sesión plenaria incluye el debate para crear, con una previsible unanimidad, la comisión de estudio que debe concluir con una reforma largamente pedida y siempre aplazada.
Incluso ese debate, al que durante dos décadas se opuso CC, obligará a modificar el orden del día del pleno, pues la presidenta del Parlamento, Carolina Darias, ha asegurado tras la reunión de la Mesa y la Junta de Portavoces que se adelantará la sesión plenaria a las 11:30 horas para iniciar el debate cuando finalice el turno de preguntas de control, para que el mismo esté resuelto antes de la pausa previa a iniciar la sesión vespertina.
El martes, por tanto, se debatirá la que es la primera iniciativa de la IX Legislatura, pues se presentó por PP, Podemos y NC incluso antes de que Fernando Clavijo se sometiera a la investidura como presidente del Gobierno. Una propuesta a la que se ha unido la que en enero presentaron socialistas y nacionalistas para solicitar que en dicha comisión también sea objeto de debate la propuesta pactada por el Pacto e incluida en la modificación del Estatuto de Autonomía que ya ha sido aceptada a trámite por el Congreso de los Diputados.
Dos propuestas, una comisión
La propuesta que nacionalistas y socialistas aprobaron en solitario a finales de la pasada legislatura reduce a la mitad las actuales barreras electorales (3% regional y 15% insular), admite la posibilidad de crear una circunscripción regional de 10 diputados y modificar que una isla más poblada que otra tenga menos diputados, como sucede ahora con Fuerteventura y La Palma. Una propuesta que claramente insuficiente para PP, Podemos y NC, que quieren acabar además con la triple paridad.
Este concepto, defendido hasta el momento por CC y por el líder de ASG, Casimiro Curbelo (“las paridades han sido positivas para mejorar la calidad de vida de las islas no capitalinas en su conjunto”, ha asegurado), permite que Tenerife y Gran Canaria tengan los mismos diputados (15), que juntas sumen lo mismo que el resto de las islas (30) que y ninguna provincia tenga más escaños que la otra (30 cada una).
Sin embargo, desde la oposición se afirma que este sistema, que pudo estar justificado en los inicios de la autonomía, pervierte la democracia porque permite que una minoría poblacional del 17% pueda elegir la mitad del Parlamento, exactamente lo mismo que el 83% restante de canarios.
Los defensores de la triple paridad, como Curbelo, resaltan la importancia del territorio frente a los números y, al respecto, ha recordado que a nivel nacional también se prima electoralmente a las provincias menos pobladas. De lo que se ha olvidado Curbelo es de que, precisamente, en las negociaciones para formar el Gobierno estatal se ha incluido la modificación de la Ley electoral para acabar, entre otras cuestiones, con esa situación.