El Ayuntamiento abre expediente para determinar la responsabilidad del vertido
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha incoado un expediente administrativo para determinar las posibles responsabilidades urbanísticas o medioambientales del vertido de fuel en la playa de Las Gaviotas.
Según informó el concejal de Desarrollo Sostenible del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Néstor Hernández, la empresa responsable de la tubería de fuel, Disa, “ha colaborado, pero es nuestro deber garantizar la defensa del interés general” de los ciudadanos.
Hernández explicó los trabajos de limpieza que se llevan a cabo en la zona desde el pasado 14 de octubre, cuando se rompió el conducto de la compañía Disa que suministra combustible a la central eléctrica de Unelco en Jinámar, acompañado del delegado de la Dirección General de costas en Canarias, Carlos Cárdenes, y el concejal de Playas, Héctor Núñez.
Hasta este domingo, 21 de octubre, se han retirado 275,3 toneladas de arena contaminada con fuel, 10,35 toneladas de agua contaminada y 7 toneladas de material vario. Además de los restos de este vertido, en la limpieza se han retirado también fuel histórico de vertidos de hace años y restos sólidos (tuberías, maderas, etcétera). Sin embargo, desde Disa todavía no se ha comunicado cuánta cantidad de fuel se vertió.
Para Hernández, tanto el vertido como la limpieza de esos restos sólidos debe llevar a una “reflexión estratégica” sobre la planificación de las infraestructuras que suministran servicios básicos a la ciudad. Para el Ayuntamiento, “no es conveniente” que se concentre la producción de servicios estratégicos como el agua de abastecimiento, situándose “al lado de una central eléctrica que se suministra con fuel o al sur de una instalación portuaria”.
Por ello, pidió que los nuevos módulos de desalación necesarios se sitúen “en el litoral norte, más alejados de zonas de riesgo”. Actualmente, señaló, la producción está “concentrada en un solo punto”, lo que hace que “cualquier incidente pueda poner en riesgo el suministro” a la ciudad.
Así, se trataría de “distribuir la producción de servicios básicos”, manteniendo las desaladoras y depuradoras actuales, pero ampliando la producción en 14.000 metros cúbicos diarios con dos nuevos módulos en el litoral norte, hasta la franja límite con Arucas. En este sentido, dijo no estar cerrado a la posibilidad de “mancomunar servicios”, recordando que la financiación de la obra correspondería al Gobierno de Canarias.
Sumidero del Puerto
Por lo que se refiere a la playa de Las Gaviotas, Hernández destacó que los trabajos de limpieza continuarán, “como mínimo” hasta el 28 de octubre. Para el delegado de la Dirección General de costas en Canarias, Carlos Cárdenes, esta playa es “el sumidero de todo lo que se vierte en el Puerto”, por lo que “no sólo es cuestión de limpiar, sino de prevenir”.
Actualmente se trabaja “en lo pastoso y que es posible que se mueva para otra zona”, pero es necesario, dijo, mejorar los vertidos que se producen desde la zona del Puerto por la limpieza de buques, tanto en forma de fuel como de vertidos sólidos.
Para Néstor Hernández, este Puerto “funciona relativamente bien”, pero desde el Ayuntamiento se dirigirán a la Autoridad Portuaria “para que estudie las posibilidades de mejorar el control de los accidentes fortuitos o de limpieza de buques fuera de la zona portuaria”.
Para Cárdenes, “depende más de la voluntad de los que están en el barco” que de la vigilancia o las sanciones que se puedan poner, aunque apuntó a la posibilidad de volver a poner en marcha embarcaciones que, explicó, existían en el Puerto y que hacían “de rastrillo” de todo lo que se vertía.
Sobre la existencia de otras tuberías similares a la que se rompió, Hernández destacó que, en un principio, no existen fuera de lo que es el ámbito portuario. De todos modos, destacó que el Ayuntamiento y el Gobierno de Canarias se reunirán para elaborar “un mapa de riesgo de instalaciones” de este tipo.
