Comienza el verano
La estación más larga del año, el verano, comienza este lunes en el Hemisferio Norte a las 13.28 hora oficial peninsular, que durará 93 días y 15 horas, según lo acordado en el convenio astronómico que recoge el Observatorio Astronómico Nacional (OAN), del Ministerio de Fomento.
El inicio de las estaciones viene dado por aquellos instantes en que la Tierra se encuentra en unas determinadas posiciones en su órbita alrededor del Sol. En el caso del verano, esta posición se da en el punto de la eclíptica en el que el Sol alcanza su posición más boreal.
El día que esto sucede, el Sol alcanza su máxima declinación norte y permanece casi sin moverse durante varios días, y por eso, a esta circunstancia se la llama también solsticio o sol quieto de verano. En este instante en el Hemisferio sur se inicia el invierno.
El día del solsticio de verano corresponde al de mayor duración del año entre la salida y la puesta del Sol en un lugar dado. Así, el próximo día 21 de junio va a ser el día de mayor duración, y por ejemplo, en Madrid esta duración será de 15 horas y tres minutos, a comparar con las nueve horas y 17 minutos que durará el día más corto (el 22 de diciembre).
Esta diferencia de casi seis horas depende de la latitud del lugar, siendo nula en el Ecuador y siendo extrema (24 horas) por encima del Círculo polar ártico. Es precisamente por encima del Círculo polar boreal donde algunos días al año (alrededor del 21 de junio) se da el fenómeno del Sol de medianoche, en que el astro rey es visible por encima del horizonte durante las 24 horas del día. (En la Antártida tiene lugar alrededor del 21 de diciembre)
Alrededor de esta fecha se encuentran el día en que el Sol sale más pronto y aquél en el que se pone más tarde. Un hecho circunstancial no relacionado con las estaciones se da también en esta época: el día del 'afelio', es decir, el día en que el Sol y la Tierra están más alejados entre sí a lo largo del año.
La Tierra se mueve más lenta
Es este mayor alejamiento al Sol la causa de que la Tierra se mueva más lentamente a lo largo de su órbita elíptica durante el verano (según la conocida como tercera Ley de Kepler) y por lo tanto la duración de esta estación sea mayor.
Además, el día en que el Sol sale más pronto es el 14 de junio, mientras que el día en que se pone más tarde es el 27 de junio. Por estas fechas se da también el máximo alejamiento anual (afelio) entre la Tierra y el Sol. En esta ocasión, se dará el próximo día 6 de julio, siendo la distancia de algo más de 152 millones de kilómetros, unos cinco millones más que a principios de enero, cuando la distancia al Sol alcanza su mínimo anual.
Por otro lado, la actividad del Sol se caracteriza por la presencia en su superficie de manchas, fulguraciones y protuberancias, y en la Tierra, se aprecia en alteraciones en la propagación de las ondas de radio y en una mayor presencia de auroras polares. Esta actividad sigue un periodo de aproximadamente once años, y está asociada al ciclo magnético del Sol.
A lo largo del verano habrá dos eclipses, aunque ninguno de ellos será visible en España tendrán lugar el día 26 de junio uno parcial de Luna, que será visible en el sureste asiático, Australia, regiones del Pacífico y América y que vendrá acompañado de uno total de Sol, que se dará dos semanas más tarde, el 11 de julio, y será visible en el Océano Pacífico Sur y el extremo meridional de Sudamérica.
Durante el mes de julio de 2010 se producirán dos pasos de Júpiter por el Ecuador Celeste; el 8 de julio Júpiter cruza el Ecuador de sur a norte y el 31 de julio el cruce será de norte a sur. Habrá un tercer paso (de sur a norte) que se producirá el 5 de febrero de 2011.
Fenómenos astronómicos
La primera Luna llena del verano se dará el 26 de junio, dándose las siguientes 29 ó 30 días después y habrá otras el 26 de julio y el 24 de agosto. Por otro lado, en cuanto a la visibilidad de los planetas, como luceros matutinos se podrá observar a Júpiter y a Urano, que pasarán a ser visibles durante toda la noche en septiembre y agosto respectivamente. Al atardecer se verán Venus, Marte y Saturno.
Concretamente, el día 20 de septiembre se producirá el máximo acercamiento anual de Júpiter a la Tierra. Además, las lluvias de meteoros más intensas del verano son las delta Acuáridas, cuyo máximo ritmo se da alrededor del 30 de julio, y la más famosa del verano, la de Las Perseidas, cuyo máximo se da alrededor del 12 de agosto.
Constelaciones
En cuanto a las agrupaciones ficticias de estrellas conocidas como constelaciones, alrededor de la estrella Polar se verán a lo largo de la noche Casiopea, Cefeo, el Cisne, el Dragón y las dos Osas. De este a sur a oeste se verán Pegaso, el Aguila, la Corona Boreal y la Cabellera de Berenice.
Igualmente, cerca del horizonte se verán a lo largo de la noche algunas de las constelaciones zodiacales, de la Virgen a Acuario, esta última ya cerca del amanecer. Entre las estrellas más brillantes visibles en esta época destacan las que constituyen al triángulo veraniego: Altair (en el Aguila), Deneb (en el Cisne) y Vega (en la Lira).