El PSOE en Logroño pide al CCN que retire su boicot al vino de Rioja
El Gobierno de La Rioja, que preside con mayoría absoluta Pedro Sanz (PP), ha interpuesto un recurso contencioso administrativo para cobrar del Ministerio de Trabajo 2,1 millones de euros para la atención de inmigrantes, pero se niega a recibir a los seis niños que les corresponden en el reparto de menores llegados en patera a Canarias, actitud que también mantiene la presidenta madrileña Esperanza Aguirre.
Sanz se ha abonado también al discurso de la “invasión” de los inmigrantes y aunque estos son una pieza básica en el engranaje económico riojano por su aportación como mano de obra en las tareas vitivinícolas y de hostelería ?17.000 cotizantes a la Seguridad Social- el líder del PP mantiene un discurso de rechazo a los mismos.
La polémica política en La Rioja, donde el Grupo Socialista en la oposición del Parlamento ha presentado varias preguntas para el próximo pleno, se ha suscitado desde las Islas, después de que el Centro Canario Nacionalista (CCN), a través de su secretario ejecutivo, Benito Codina, haya pedido un boicot a los productos riojanos tras la negativa de Sanz a acoger en sus escuelas a los menores procedentes de Canarias.
Codina tachó de “absolutamente insolidario” al Ejecutivo riojano y reclamó que “debe ser castigado por los canarios ya que no sólo afecta a la necesaria cooperación que se espera entre distintos territorios de un mismo Estado en un tema que no es responsabilidad únicamente de Canarias, sino que atenta principalmente a los derechos de los menores a recibir un trato digno durante el tiempo que permanezcan en España”. Tras pedir el boicot de los productos de la Rioja, en especial el vino, Codina añadió que esta campaña debía producirse porque “con su comportamiento manifiesta actitudes que bien pudieran enmarcarse como xenófobas y racistas”.
La responsable del Grupo Socialista en el Parlamento riojano, Inmaculada Ortega, ha declarado a CANARIAS AHORA que la consejera de Servicios Sociales del PP, Sagrario Loza, ha desatado protestas por su actitud de rechazo a los menores inmigrantes: “El Foro de la Inmigración ya lo ha hecho y con él diversas ONG, sindicatos y ayuntamientos que esperaban ese dinero del Estado para atender a la integración de los que han llegado de fuera para trabajar”.
Ortega ha pedido además al CCN que reconsidere el boicot al vino de Rioja porque “hay que castigar a quien se lo merece y en este caso los bodegueros y el sector económico del vino no tienen la culpa de padecer un presidente de una insolidaridad tan vergonzosa como la de Sanz”.
Mientras, Sanz se ha negado a responder al CCN porque no quiere hacer “propaganda a nadie, y menos a un partido político residual que quiere hacerse publicidad a nuestra costa y hay cosas que están fuera de lugar y que no merecen dedicarles más tiempo”. La polvareda pública ocupa estos días la prensa de Logroño y los socialistas riojanos han lamentado esta polémica al estimar que “perjudica y afecta negativamente a nuestra imagen en el exterior y en este caso a nuestra economía”. En un comunicado hecho público en la capital riojana, añaden que “no somos como Pedro Sanz, frentista en la política y poco considerado en sus deberes como parte del Estado”, sino “un pueblo colaborador, integrado y que siempre ha sabido arrimar el hombro solidario con quien lo necesita”.