Yutókintumí?

"...You talking to me?"

Leandro Betancor Fajardo

0

De pequeño, alguna vez al salir de la ducha, mientras me acicalaba y peinaba, hablaba conmigo mismo en el espejo. 

Me miraba y trataba de adivinarme en el futuro. Creía que podía visualizar a mi yo de 30 años, entonces una edad que entendía yo de alguien muy mayor. Ahora, pasados los 40 creo, iluso, que sigo sin ser tan mayor.

En aquellos soliloquios siempre creí ver en aquel potencial yo a alguien casi igual a los que entonces eran los ídolos televisivos de aquel tiempo y a los que, estaba convencido, terminaría pareciéndome: Sony Croquet de Corrupción en Miami, Starsky, Donovan el de V, Benedict del Equipo A, el guapo de los tres Padres Forzosos o, en mi fantasioso delirio, llegué a pintarme un bigote creyendo ser el Tom Selleck de Mágnum

Era, sin saberlo, un pequeño rejo de vanidad que asomaba temprano para alguien cuya generación careció de tantos satélites orbitando alrededor de la propia imagen como los que hay ahora. Algo inocente si se compara con lo que vemos hoy, en plena era del selfie. Un terrible escrutinio que en ocasiones acompleja, cuestiona y hasta hace peligrar la estima y la identidad, todavía en construcción, de muchas y muchos jóvenes. El espejo deformante de las redes sociales, los ficticios sentimientos de pertenencia, la frágil telaraña relacional que sucede más en el ciber espacio que en las plazas y patios de colegio, está construyendo una generación entera de proyectos frustrados de uno mismo. Y no será porque muchos no lo llevan tiempo avisando.

Yo me sigo mirando en el espejo y veo a veces al niño que soñaba con parecerse poco al reflejo que le da ... pero sigue siendo él. Y aquel.

Y lo mejor de todo es que he empezado a mirarme de nuevo, siempre optimista, tratando de adivinarme cómo seré en los próximos años y, oh sorpresa, al otro lado del espejo siempre está el Robert de Niro de Una Terapia Peligrosa que se ha comido al de Taxi Driver, apuntándome con su mágnum y diciéndome, desde el otro lado: “…you talking to me?”.

Y, aunque yo me veo bien… siempre niego con la cabeza.

Etiquetas
stats