El Cabildo de Tenerife y los ayuntamientos se comprometen a diseñar un “plan de choque” contra los vertidos al mar

Imagen de archivo de un vertido de aguas en la zona de La Hondura, en Santa Cruz de Tenerife.

Efe / Tenerife Ahora

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El Cabildo de Tenerife se ha comprometido a diseñar un plan de choque con los 31 municipios de la isla para abordar “el gravísimo problema del saneamiento” y así lograr el objetivo “inaplazable” de una política “de vertidos cero” al mar, según ha anunciado este lunes la presidenta de la corporación, Rosa Dávila (CC).

La máxima responsable del Cabildo de Tenerife y su vicepresidente, Lope Afonso (PP), han informado este lunes de que este es uno de los asuntos abordados en la reunión del Consejo Insular de Administración Territorial (CIAT), en donde además se han tratado cuestiones relacionadas con la vivienda y el empleo.

Rosa Dávila ha agradecido el apoyo “unánime” que en su opinión han manifestado los alcaldes y alcaldesas presentes en la reunión a que haya una política insular de aguas de manera integral “y, sobre todo, con un objetivo muy importante: una gestión sostenible del agua”.

Esta cuestión es además “un objetivo irrenunciable” para el Cabildo de Tenerife, afirmí, y por ello está abordando las grandes infraestructuras de los sistemas generales de depuración, de colectores, y ha dicho que también “es fundamental tener la concurrencia de los ayuntamientos” en este ámbito.

Para ello, según el Cabildo, se diseñará un plan de choque con los ayuntamientos de manera que se puedan conectar las viviendas al saneamiento para que las aguas residuales terminen en los colectores y no haya vertidos en el litoral y en las aguas del subsuelo, ha señalado Dávila.

El vicepresidente insular, Lope Afonso, ha precisado que este lunes se ha dado el primer paso desde el punto de vista técnico y político para que en los próximos meses se concrete el plan de choque y ha puntualizado que los municipios atienden directamente la gestión de sus sistemas de saneamiento, abastecimiento y depuración pero, ha añadido, “tenemos claro que esto no es una política de compartimentos estancos sino que es una política insular”, de ahí la iniciativa del Cabildo.

Otro asunto abordado en el CIAT ha sido la vivienda, una política en la que el Cabildo de Tenerife “no ha estado presente de una forma activa en los últimos años” pero que en este mandato se ha activado para poder facilitar vivienda asequible especialmente para quienes más lo necesitan, personas vulnerables y jóvenes, ha proseguido Rosa Dávila.

De ahí los dos programas “novedosos” que ha presentado la corporación insular para adquisición de vivienda y de suelo y el vicepresidente Lope Afonso ha admitido que desde el punto de vista de las competencias del Cabildo “no es fácil jugar en el ámbito de la dinamización del mercado inmobiliario pero sí hemos encontrado la fórmula” a través de los diferentes acuerdos que se han adoptado con el Instituto Canario de la Vivienda (Icavi).

Se trata de una forma de gestión “triangular” con el Icavi y los municipios para que el Cabildo pueda favorecer la adquisición de vivienda o de suelo, y en ambas modalidades la corporación insular “va a participar de forma activa con el objetivo de encontrar soluciones a un problema tan grave como el de la vivienda”.

De esta manera, una vez obtenga la financiación necesaria, el Cabildo podrá poner suelo para su urbanización, una vez que los municipios señalen aquellas partes de sus territorios que están en disposición de ser urbanizables con la finalidad de dar lugar a la generación de vivienda, ha añadido Afonso.

La otra modalidad es la adquisición de viviendas que estén por construir o que estén ya finalizadas, pero que por las circunstancias que sean no se hayan podido poner en el mercado y que, también en cooperación con los ayuntamientos, se facilitarán a las personas que los municipios tengan señaladas como demandantes con especial necesidad de vivienda.

Además en la reunión del CIAT se ha tratado sobre la puesta en marcha de un plan de empleo por parte del Cabildo, para cuya financiación se ha pasado de 8,2 a 10 millones de euros y para cuya puesta en marcha la corporación insular espera recibir las aportaciones de los consistorios.

Al respecto, la presidenta Rosa Dávila ha puntualizado que la situación en este ámbito es “muy heterogénea”, pues se parte de las necesidades de empleo en municipios muy pequeños, que tienen menos de 5.000 habitantes, frente a otros como el de Santa Cruz de Tenerife “que supera los 300.000 residentes”, ha dicho.

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