La directora del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro, Natalia Menéndez, ha anunciado que deja este cargo. Ha argumentado que “los cargos públicos no deben quedarse a vivir, por muy bien que lo hagan”, y porque después de siete años y ocho ediciones toca “dejar paso a proyectos nuevos”. Menéndez ha explicado que continuará haciendo labores de gestión hasta el 31 de diciembre de este año, fecha en la finaliza en su contrato, y a la espera de que el Patronato del Festival, presidido por el ministro de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, designe a la persona que le sustituya en el cargo.
La aún directora del Festival de Teatro Clásico de Almagro ha aludido a la existencia de “un techo de cristal económico” que ha provocado cierto estancamiento de su proyecto para el festival y le ha impedido seguir avanzado en las ideas que consideraba necesarias. En este sentido, ha lamentado que el festival esté “sometido a vaivenes partidistas y políticos, como ha pasado este año”, y ha abogado porque exista un presupuesto “más atado” que no esté a merced de los cambios de voluntad de los responsables institucionales.
También ha pesado en su decisión la necesidad de volver a la parte más creativa de las artes escénicas, que, como actriz y directora teatral, había dejado de lado durante sus años de gestión al frente del Festival de Almagro.
Respecto a la persona que le sustituirá en el cargo, Menéndez ha asegurado no tener “ni idea” de quién será, aunque espera que se elija “lo antes posible” y que a principios de septiembre haya un nuevo director o al menos se haya establecido “cómo tiene que ser el proceso de selección”.
Mejoras en el ámbito técnico
Más allá del trabajo realizado para amortizar la deuda -1,5 millones de euros cuando ella se puso al frente del certamen- que arrastraba el festival en los últimos años, Natalia Menéndez ha destacado las mejoras realizadas en el ámbito técnico que facilitarán la entrada a la nueva dirección, porque “la electricidad y la fontanería de la casa está totalmente saneada”, ha dicho.
Menéndez ha avanzado que también le acompañará en su salida el gerente, Fernando Bonelli, que ha sido su “mano derecha”, y ha adelantado que intercederá con el nuevo responsable para que conozca “la valía y el trabajo” del resto de personas del equipo para que pueda seguir trabajando con ellos.
La todavía directora del Festival de Almagro ha asegurado que los certámenes de Almagro OFF y Barroco Infantil se mantendrán, al menos en 2018, y ha instado a los futuros responsables a que sigan apostando, “con esta o con otra fórmula”, por acercar el teatro clásico a los jóvenes profesionales y al público infantil.
“Una de las experiencias más importantes de mi vida”
Haciendo balance de sus años al frente del Festival, la actriz y directora teatral ha asegurado que “ha sido una de las experiencias más importantes de mi vida”, que le ha permitido aumentar su conocimiento de la creación barroca, tener “encuentros maravillosos” y vivir un importante desarrollo personal y profesional en el ámbito de la gestión de equipos. “La parte más dura, conflictiva y dolorosa que he vivido con la gestión se queda muy por debajo de lo aprendido y disfrutado”, ha asegurado Natalia Menéndez.
Por otra parte, en cuanto al balance de la edición de este año, ha culminado su 40 edición con la visita de más de 70.000 personas y una ocupación que ronda el 98,2%, además de una recaudación en taquilla ha sido de 588.533 euros. Menéndez ha celebrado las cifras de esta edición, que “vuelven a mejorar las de años anteriores”. Así, además del porcentaje de ocupación, la tasa de venta ha sido del 96,51% con 28.708 entradas.
Por otra parte, más de 21.000 personas han disfrutado de los espectáculos en la Plaza Mayor o el Teatro en los Barrios. Las exposiciones han tenido 25.130 visitantes; 322 alumnos han asistido a los cursos; 41 a los encuentros; y el Festival ha contado con 30 voluntarios y 3 personas en prácticas. La ocupación hotelera ha sido del 94,47% los viernes y sábados; y del 66,29% de domingo a jueves.