Las familias que vivan en pisos alquilados y que estén en riesgo de desahucio al no poder hacer frente al pago de las mensualidades podrán acogerse a una nueva ayuda aprobada por la Generalitat Valenciana.
La consellera de Vivienda, María José Salvador (PSPV), ha anunciado este miércoles junto al presidente de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, Rubén Alfaro (PSPV), que su departamento ha aprobado una partida de 2,2 millones de euros destinada a este fin.
Según ha explicado Salvador, las aportaciones podrán llegar a 100 euros al mes durante un periodo máximo de un año y podrán optar a ellas familias con ingresos inferiores a 11.100 euros o a 14.900 euros en el caso de los hogares con algún miembro con discapacidad o en situación de dependencia.
Para optar a estas ayudas, los interesados deberán dirigirse a los servicios sociales del Ayuntamiento de su localidad, que serán los encargados de tramitarlas y valorar los casos.
Salvador ha explicado que calculan que estas aportaciones llegarán a entre 2.000 y 2.500 unidades familiares y que el objetivo es evitar que desahucien a estas personas por el impago de las cuotas.
Evitar cortes de luz, gas y agua
La consellera ha recordado que también se han aprobado recientemente ayudas de emergencia por un montante de 3,7 millones de euros destinadas a evitar cortes de suministros como luz, gas o agua a personas en riesgo de exclusión. Estas aportaciones también se deben solicitar a través de los ayuntamientos.