El director de cine Alejandro Amenábar se ha mostrado partidario de mirar al pasado “sin miedo” y, haciendo ese ejercicio, ha comentado que es fácil detectar en el presente “muchos síntomas” que recuerdan la “inestabilidad” de la primera mitad del siglo XX, aunque se ha mostrado “optimista”: “creo que en este país acabaremos entendiéndonos”.
Amenábar ha participado en el coloquio de La Buena Estrella celebrado en el Edificio Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, donde ha hablado con el público de su última película 'Mientras dure la guerra', ambientada en el verano de 1936 cuando el célebre escritor y rector de la Universidad de Salamanca decide apoyar públicamente la rebelión militar.
La deriva sangrienta del conflicto y el encarcelamiento de algunos de sus compañeros hacen que Miguel de Unamuno empiece a cuestionar su postura inicial y a sopesar sus principios.
Este largometraje ha contado con el asesoramiento del catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Zaragoza Julián Casanova, quien también ha estado presente en el coloquio.
Antes, en un encuentro con los medios de comunicación, el director de 'Tesis' y 'Los Otros' ha reflexionado sobre el rodaje y lo desconocido que llegan a ser algunos momentos de la Historia, también para él.
Precisamente, Amenábar ha reconocido que, a pesar de que estudió esta época en el instituto, también desconocía una parte. “Tuve que aprender mucho sobre la marcha”, ha comentado para añadir a continuación que es hora de que mirar al pasado sin miedo.
Para Amenábar lo más complicado fue “imaginar” la intimidad de Miguel de Unamuno y retratar ese lado más oculto frente a la parte pública del personaje.
Estos días es fácil hacer una similitud entre la España polarizada que aparece la película y la situación que se vive en Cataluña.
Sobre esta cuestión, Amenábar ha recordado que se identifica con el mensaje de “conciliación” y “unidad” del intelectual vasco, aunque no se incluye en el largometraje. “Yo siempre estaré del lado de todo que tenga que ver con la construcción, la conciliación y la unidad”, ha matizado.
Y se ha mostrado “optimista”, a pesar de que a lo largo de la película hay una sensación de que los ciclos de la historia se repiten. “Yo quiero pensar que en este país acabaremos entendiéndonos”, ha resaltado, al tiempo que ha reivindicado al que piensa diferente.
'Mientras dure la guerra' es una película “basada en hechos reales” como fue también Mar Adentro, en la que Amenábar ha querido dar argumentos tanto a los espectadores de “izquierda como de derecha”.
Esto le llevó a hacerla sin miedo pero con “prudencia”, como siempre que se trabaja con “material altamente sensible o inflamable”, como ha sido el caso.
En su próximo trabajo, el director de cine cambiará totalmente de registro en una miniserie sobre una historia de amor. “Es algo luminoso, que es lo que me apetecía hacer, no tiene nada que ver con esto”, ha concluido.