La directora del Instituto Andaluz del Flamenco, María Ángeles Carrasco, ha expresado hoy sus condolencias por el fallecimiento del cantaor Manuel Molina, del dúo Lole y Manuel, que ha muerto esta madrugada a los 67 años en San Juan de Aznalfarache (Sevilla), víctima de un cáncer.
En un comunicado la directora del Instituto Andaluz del Flamenco, dependiente de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte, ha transmitido su pésame a la familia y allegados por la pérdida de este artista que “ha marcado un antes y un después en la historia del flamenco”.
“Su estilo propio, su capacidad de emocionar, su forma de interpretar versos propios o ajenos quedan en el recuerdo de una generación, sabedora de que ha podido disfrutar de un artista único e irrepetible”, ha indicado María Ángeles Carrasco.
Ha recordado la aportación discográfica de Manuel Molina, que “abrió sin dudas nuevos públicos al flamenco, tanto por su estética como por su música, abierta a influencias de otras culturas”.
“Se podría decir que con este dúo cambió el sonido del flamenco”, ha afirmado la directora del Instituto Andaluz del Flamenco.
Manuel Molina Jiménez, nacido en Ceuta en 1948 pero afincado en Sevilla, formó parte con Dolores Montoya (Sevilla, 1954) del dúo flamenco Lole y Manuel, con quien fue padre de la también artista Alba Molina (Sevilla, 1978).
Según han informado fuentes del Ayuntamiento de San Juan de Aznalfarache, al mediodía se instalará la capilla ardiente en el teatro Romero San Juan de esta localidad sevillana.