El beneficio neto del banco británico Lloyds Banking Group alcanzó en la primera mitad del año 1.639 millones de libras (1.852 millones de euros), una caída del 12 % respecto al mismo periodo del año anterior, informó hoy la entidad.
En un comunicado remitido a la Bolsa de Valores de Londres, el banco señaló que sus ingresos totales en el semestre fueron de 9.273 millones de libras (9.919 millones de euros), un ascenso del 4 % respecto a los mismos seis meses de 2016.
El beneficio antes de impuestos subió el 4 % hasta situarse en 2.544 millones de libras (2.874 millones de euros).
El grupo bancario ha indicado que ha reservado efectivo para atender las incorrectas ventas de unos seguros de protección de ingresos conocidos como PPI.
Los préstamos aportados a los clientes fueron en el semestre de 453.000 millones de libras (511.890 millones de euros), mientras que los depósitos de los clientes fueron de 417.000 millones de libras (471.210 millones de euros), según el comunicado del banco.
El ratio préstamos-depósitos fue en el semestre del 109 %, mientras que los activos totales de la entidad alcanzaron en el periodo en 815.000 millones de libras (920.950 millones de euros).
En cuanto a la solvencia, el Tier 1 (recursos propios) fue en el semestre del 13,5 %.
En su comunicado, el grupo bancario destacó su buen rendimiento gracias a su transformación en una entidad “simple, de bajo riesgo, comercial y centrada en el sector minorista del Reino Unido”.
El consejero delegado del banco, António Horta-Osório, ha destacado que la economía del Reino Unido aún mantiene su fortaleza debido al buen nivel de empleo y el crecimiento de la economía en los últimos años, junto con un aumento de los precios de las viviendas en el país.
La entidad recuerda que la inflación está aumentando debido a la depreciación de la libra esterlina, lo que puede afectar el consumo, pero resalta que la economía debería beneficiarse por el incremento de las exportaciones y los ingresos de los activos externos.
El consejero delegado ha puntualizado que la “prioridad estratégica” de la dirección es centrarse en el control de los costes y añadió que mantiene su compromiso con su plan “Ayudar al Reino Unido a prosperar”, destinado a ayudar a sus clientes a iniciar a alguna actividad empresarial o fomentar sus exportaciones.