Los cuatro mineros de la Hullera Vasco-Leonesa (HVL) encerrados en el pozo Aurelio, en Santa Lucía de Gordón (León), han abandonado su protesta pasadas las siete de esta tarde y han sido recibidos a su salida de la mina como héroes por centenares de personas entre familiares y compañeros.
Elías Ortega, Sócrates Fernández, Álvaro Cuesta y Daniel Garguño iniciaron su encierro el 13 de junio para exigir al Gobierno la liberación de las ayudas al cierre aprobadas por la Comisión Europea al cese de la actividad minera, y desde el martes endurecieron su protesta y se declararon el huelga de hambre.
El médico que les visitaba a diario recomendó hoy al comité de empresa que finalizasen el encierro debido al deterioro físico que empezaban a sufrir después de dieciocho días a doscientos metros de profundidad, agravado con la huelga de hambre.
El presidente del comité de empresa, Julio Gómez, y otros compañeros han visitado a los encerrados y les han convencido para deponer su actitud con al argumento de que el objetivo está cumplido, y de que han logrado hacer visible el problema que supone el bloqueo de las ayudas al cese de la actividad minera.