Madrid, 14 dic (EFE).- La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha criticado a los grupos que han denunciado “supuestas traiciones o votos que rompen España” en la negociación presupuestaria, porque nadie puede “otorgarse la titularidad de ser mejores españoles”.
Durante su intervención en el Pleno del Senado para defender el proyecto presupuestario de 2021, que este lunes afronta el trámite de vetos, Montero ha defendido que con los apoyos logrados los Presupuestos salen “fortalecidos y mejorados”.
Por ello, ha recordado que todos los parlamentarios “representan tan legítimamente a los ciudadanos españoles” como los demás y, así, ha criticado a quienes pretenden “otorgar carnés de primera o segunda a los representantes políticos en función de los propios intereses”.
“Ser diferente no es delito”, ha subrayado, y “a España no le sobra ningún español (...) ni mucho menos 26 millones”, en referencia a la cifra de españoles que sugería “fusilar” un chat de militares retirados.
“En estas ultimas semanas hemos tenido que escuchar muchos desvaríos de supuestas traiciones o votos que rompen España”, ha añadido, y “ya está bien”, porque “nadie es propietario de este país ni de sus símbolos. A España se le defiende cumpliendo la Constitución en su integridad, no solo algunas de sus partes”.
Montero ha instado a “defender la utilidad de la política, con aciertos y errores”, porque lo más importante es buscar soluciones y ser capaces de lograr puntos de encuentro
Por otra parte, Montero ha señalado que los efectos de la crisis del coronavirus serán “transitorios”, lo que permitirá una recuperación más rápida, como espera que ocurra “el año que viene cuando superemos esta segunda ola de la pandemia gracias a la campaña de vacunación”.
La ministra ha destacado también el carácter territorial de los Presupuestos y ha insistido en que a “España le conviene tener una mirada comprensiva” con la realidad periférica, y ha reiterado que el Gobierno tiene voluntad de hacer una política en favor de las entidades territoriales, toda vez que en 2020 el trasvase de recursos del Estado a las CCAA les ha aumentado la financiación en un 22 %.