La factura eléctrica volvió a subir en agosto, un 0,7 % en comparación con julio, para un consumidor medio acogido a la tarifa regulada o precio voluntario al pequeño consumidor (pvpc).
Según datos del simulador de factura de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el recibo eléctrico para un consumidor doméstico “tipo” -con una potencia contratada de 4,4 kilovatios (kW) y un consumo anual de 3.000 kilovatios hora (kWh), es decir, 250 kWh mensuales-, ascendería en agosto a 53,29 euros.
Este consumidor tipo pagará 25,98 euros por consumo, 15,16 euros por término fijo, 9,25 euros de IVA, 2,1 euros por impuesto eléctrico y 0,8 euros en concepto de alquiler de contador.
La factura eléctrica de agosto es así ese 0,7 % más cara que la de julio, donde se sitúo en 52,88 euros, en la que supone la cuarta subida consecutiva mensual.
No obstante, el recibo medio de agosto es un 11,5 % más barato que el de agosto del año pasado cuando ascendía a 60,25 euros.
En el acumulado del año y frente al mismo periodo del año pasado, ese consumidor medio habrá pagado 409,69 euros de electricidad en estos ocho meses, un 14,4 % menos que los 478,57 euros de hace un año.
El importe de la factura está determinado, en buena parte, por la evolución de la electricidad en el mercado mayorista, que conforma el pvpc junto con los peajes de acceso -que fija el Gobierno para sufragar las actividades reguladas, como la distribución, el transporte o las renovables- y los impuestos.