Pese a ello, los trabajadores ocupados españoles menores de 35 años se encuentran entre aquellos profesionales con las expectativas más bajas de Europa sobre sus posibilidades de encontrar un empleo.
Los jóvenes con mejores expectativas están situados en el centro y norte de Europa, con la excepción de Países Bajos. Alemania, con un 82,6%, y Reino Unido, con un 76%, muestran un mayor optimismo entre sus jóvenes a la hora de cambiar de trabajo debido en gran medida a sus bajos índices de desempleo.
El siguiente escalón, cercano al 60%, está compuesto por Italia, Países Bajos y Francia. A la cola de este ránking se sitúan España y Grecia, con un 51,3% y un 46,5%, respectivamente.
España cuenta con más de 4,7 millones de trabajadores ocupados menores de 35 años. Este colectivo ha sido uno de los más perjudicados por la destrucción de puestos de trabajo en los últimos años. A pesar de ello, Randstad destaca que los jóvenes menores de 35 años suponen el 28% del total de ocupados.
El informe de Randstad también revela que siete de cada diez trabajadores españoles se muestran satisfechos con su trabajo, un dato que coincide con las cifras de Francia y que supera a países como Alemania e Italia.
A la hora de buscar otro empleo, las jóvenes mujeres españolas se muestran mucho más activas, rozando el 15%, mientras que ellos se sitúan más de tres puntos porcentuales por debajo, en el 11,7%.
El 70% de los jóvenes encuestados afirma que su objetivo es ascender o promocionar en su entorno laboral, un dato que ha aumentado nueve puntos porcentuales respecto a hace un año y que entre las mujeres alcanza el 74%, casi 20 puntos más que tres años atrás. En el caso de los hombres, el porcentaje se sitúa en el 66%, muy similar a los datos de 2010.