Feijóo atribuye al cierre de fronteras por la pandemia la caída de población en Galicia pese a que encadena 30 años con más muertes que nacimientos

Beatriz Muñoz

0

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, atribuye a un único factor el retroceso de población que registró Galicia en 2020: el cierre de las fronteras por la pandemia cortó los flujos migratorios desde Latinoamérica. Tras conocerse los datos del Instituto Nacional de Estadísitica (INE) que confirman que un año más, y van más de 30, en la comunidad muere más gente de la que nace, el jefe del Ejecutivo se ha limitado a señalar que este es un “gap” -un desfase- al que se enfrentan “todos” los territorios del entorno.

El presidente gallego no ha hecho mención a las causas o a indicadores demográficos como los que muestran una bajada de la natalidad, a una media de hijos por mujer inferior a la española (1,02 frente a 1,18) o a que solo dos territorios (Castilla y León y Catalunya) tuvieron un peor saldo vegetativo en el año de la pandemia, en el que las restricciones para entrar en España afectaron a todas las comunidades.

Sin la llegada de personas de otros países, que Feijóo calificó de “avalancha”, la caída no se vio compensada. De acuerdo con los datos del Instituto Galego de Estatística (IGE), la última vez que nacieron más gallegos de los que murieron fue en 1987. Este indicador influye, junto con el número de ciudadanos que emigran y los que se establecen en la comunidad, en el total de personas censadas.

Feijóo no ha ofrecido una explicación sobre por qué las administraciones no están consiguiendo que se detenga esta tendencia, que en Galicia se refleja también en una caída de la población en edad de trabajar y en el envejecimiento. Los últimos datos de la Oficina Europea de Estadística (Eurostat) muestran que en 2020 había solo seis provincias españolas con una media de edad superior a 50 años. Dos de ellas son gallegas: Lugo y Ourense. Las previsiones apuntan a que dentro de 30 años toda Galicia superará ampliamente esa marca.