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La jueza del caso contra Trump por los papeles clasificados de Mar-A-Lago aplaza indefinidamente el juicio

El plan de la defensa de Donald Trump de posponer los juicios sigue su curso. El juicio federal por el caso de los papeles clasificados de Mar-a-Lago que estaba previsto para el 20 de mayo, se ha cancelado sin una nueva fecha a la vista. La jueza a cargo del caso, Aileen M. Canno, ha decidido aplazar la cita de forma indefinida por cuestiones importantes en relación a las pruebas que deben tratarse antes de que empiece el juicio. En una orden de cinco páginas, la juez ha dicho que sería “imprudente” fijar una nueva fecha de juicio ahora.

Cannon, que fue designada en el cargo por Trump cuando este era presidente, ha sido criticada por su inclinación favorable al magnate y por emitir fallos extraños que acaban beneficiando al expresidente.

Entre las cuestiones que la juez considera que deben abordarse antes de poder poner una nueva fecha para el inicio del juicio se encuentran varias mociones pendientes que ha presentado la defensa de Trump para desestimar el caso. En los cuatro casos penales que tiene el presidente, su defensa siempre ha seguido la misma estrategia: inundar los tribunales de mociones para ir ganando tiempo y conseguir posponer los juicios indefinidamente. Esta jugada vuelve a mostrarse exitosa con este aplazamiento que prácticamente congela el caso. Aunque cabe decir que gran parte del éxito en el caso de los papeles de Mar-a-Lago se debe a la misma juez, que ha aceptado casi todas las mociones que se le han presentado y que ahora se han convertido en un motivo para retrasar el juicio.

De hecho, durante una audiencia que Cannon celebró durante el mes de marzo para discutir el calendario judicial, los abogados de Trump le dijeron en vísperas de esa audiencia que podrían estar listos para ir a juicio en agosto, según el New York Times. A pesar de tener esta información, Cannon ha pospuesto el juicio indefinidamente y no ha tomado más decisiones al respecto. El calendario inicial que ya había establecido la juez de Florida, solo con las audiencias y los plazos de presentación, se alargaba hasta finales de julio. Con estos tempos incluso era muy difícil que el juicio llegara a celebrarse en agosto.

Las otras cuestiones a las que ha apelado Cannon para retrasar el juicio es que aún se debe decidir qué tipo de información sensible puede revelarse en el juicio en virtud de la Ley de Procedimientos de Información Clasificada. Con la nueva orden de la juez, la única fecha segura es la del 22 de julio, cuando debe cumplirse un requisito marcado por esta misma norma.

El aplazamiento del juicio de los papeles de Mar-a-Lago no solo disminuye las posibilidades de que haya un veredicto antes de las elecciones del 5 de noviembre, sino que da alas a un plan con mayor proyección. Si Trump gana las elecciones y vuelve a ser presidente, podría ordenar al Departamento de Justicia que le quitaran los cargos. Aunque esto implicaría entrar en terreno desconocido, la posibilidad existe. El otro caso federal con el que podría pedir que también se desestimaran los cargos es el que se tiene que juzgar en Washington DC sobre el intento de revocar el resultado de las elecciones del 2020 y el asalto al Capitolio. Este juicio tampoco tiene fecha de inicio aún.

El aplazamiento indefinido del juicio de Mar-A-Lago deja el caso de Stormy Daniels que se está juzgando en Nueva York como el único con posibles de tener un veredicto antes de que se celebren las elecciones el 5 de noviembre. En el caso de los papeles clasificados, el expresidente afronta 42 cargos, como el de retención intencional de información de defensa nacional, por haberse llevado papeles clasificados de la Casa Blanca a su residencia de Mar-A-Lago (Florida). La acusación también ha asegurado que entre los documentos que Trump se había llevado a su residencia había información sensible sobre planes militares estadounidenses y las capacidades nucleares del país.