Noviembre va camino de convertirse en el mes más caliente para el Ayuntamiento de Madrid. A la puesta en marcha de Madrid Central el próximo día 23 se le puede añadir, esa misma semana, una huelga indefinida en la recogida de basuras, que fue convocada este miércoles por los sindicatos CCOO, UGT y CGT.
La huelga arrancaría el lunes 19 de noviembre y afectaría a la retirada de los cubos que cada noche colocan las comunidades de vecinos en la calle. Todo si antes sindicatos y empresas adjudicatarias (el Ayuntamiento privatizó este servicio) no alcanzan un acuerdo en los apenas diez días que quedan para que se cumpla este ultimátum.
Los sindicatos reclaman que se abra la negociación del nuevo convenido, que afectaría a los 1.700 trabajadores contratados por las adjudicatarias FCC, UTE RM2 (Valoriza, Acciona, OHL, Ascan) y UTE Recogida Sur Madrid (Urbaser, Cespa). El antiguo convenio caducó a finales de 2017 y, según fuentes sindicales, las compañías se niegan a mantener el poder adquisitivo de los trabajadores, pese a la mejora obtenida en el contrato municipal por parte del Ayuntamiento.
Las negociaciones por el nuevo convenido se rompieron el pasado 29 de octubre. Los sindicatos esperan un movimiento de las empresas adjudicatarias para volver a la mesa de negociación y desconvocar la huelga.
En el año 2017 los sindicatos plantearon otra amenaza de huelga para el mes de noviembre, también por la negociación del convenio. Entonces llegó a ejecutarse durante dos días antes de quedar anulada por la vuelta a las negociaciones de las partes.