Revolución en Amaniel: cortan el acceso desde Plaza España y podrían hacerla semipeatonal

La calle Amaniel es estrecha, empinada, incómoda y, desde hace cinco años, una vía de alta velocidad (y peligrosidad). Cruzarla por cualquiera de sus pasos de cebra es una auténtica aventura, debido a que muchos de los vehículos la atraviesan embalados, a velocidades muy superiores a los 30 km/h y con el acelerador a tope para superar la cuesta.

Hace cinco años la calle que nace en Conde de Toreno y desemboca en Conde Duque, casi llegando a Alberto Aguilera, no presentaba estos problemas. Pero un sencillo cambio en un tramo de la calle Reyes -el establecimiento del doble sentido para facilitar unas obras- convirtió Amaniel en un auténtico infierno de tráfico: pasó de contar una media de 100 vehículos a la hora a soportar 700 coches/hora. Siete veces más.

¿Qué había sucedido? Al permitir la subida desde Plaza de España hacia Conde de Toreno, cientos de coches procedentes de la Gran Vía o la Cuesta de San Vicente que querían dirigirse hacia el norte tomaban primero Reyes y luego Amaniel como salida más rápida hacia el bulevar de Alberto Aguilera y a los distritos de Chamberí y Tetuán. Muchos de ellos a gran velocidad. La situación llegó a tal punto que vecinos e instituciones de la calle tuvieron que pedir formalmente por carta al Ayuntamiento que restringiera el tráfico en la calle. Fue el pasado mes de noviembre.

Así decía parte de la misiva firmada por la Asociación de vecinos de Malasaña y la Asamblea ciudadana del barrio universidad, el Real Monasterio y escuela infantil Comendadoras de Santiago, El Museo ABC y el Conservatorio profesional de música Amaniel: “El tráfico sigue en aumento y empeora y contrarresta todas las iniciativas que se puedan tomar para aumentar la calidad de vida de los vecinos y de la actividad comercial y cultural que se están intentando desarrollar en el barrio, además de poner en grave riesgo a los vecinos y especialmente a los estudiantes que acuden al conservatorio, al instituto Cardenal Cisneros y al colegio de Comendadoras”.

Fin al doble sentido en Reyes

Y sus protestas han sido escuchadas: la situación cambiará radicalmente el 29 de enero. Ese día, el Ayuntamiento volverá a establecer el sentido único en toda la calle Reyes, desde San Bernardo hasta Maestro Guerrero, por lo que automáticamente Amaniel tendrá un acceso más difícil desde Plaza España, informa Acibu, grupo vecinal firmante de la carta que parece haber surtido efecto en las instituciones.

El objetivo del Consistorio es “disminuir el tráfico de paso que accede desde plaza de España y procedente principalmente de la Cuesta de San Vicente”, explican desde Acibu. También se cambiará el sentido de la calle Dos Amigos para evitar tráficos que pudieran usar esta vía para atravesar el barrio desde la Gran Vía con el nuevo esquema circulatorio de Reyes.

Con estos cambios, la administración confía en que Reyes y Amaniel vuelvan a ser vías locales de distribución del tráfico en la zona de Conde Duque en lugar de los canales de distribución de grandes tráficos de paso en los que se habían convertido. El carril exclusivo del transporte público y taxis de bajada se mantiene, como también el acceso hacia Maestro Guerrero desde Plaza España, aunque ya no servirá para entrar en Amaniel por el cambio de sentido de Dos Amigos.

Posible semipeatonalización

La reordenación del tráfico no es la única actuación que podría afectar a Amaniel. Se trata de una “primera medida” que podría derivar en otras de mayor calado. El Ayuntamiento ha explicado a Acibu que para 2017 -año en el que está prevista la inclusión de la zona en el Área de Prioridad Residencial de Centro- podría producirse “una reurbanización de la calle Amaniel que mejore las condiciones de movilidad y accesibilidad hoy bastante deficientes”.

La actuación podría llegar a semipeatonalizar la zona, convirtiendo Amaniel y los tramos de sus plazas Conde de Toreno y Comendadoras en una vía de prioridad peatonal, al estilo de las ya existentes al otro lado de San Bernardo. El Consistorio, que estudia implantar esta medida, cree que así “se facilitaría su uso como acceso a los distintos equipamientos de su entorno y se convertiría en una calle amable para residentes y visitantes”.