Marín ha coincidido con Puigdemont en la tradicional ofrenda floral al monumento de Rafael Casanova por la Diada, y cuando se ha cruzado con él ha aprovechado para pedirle que rebaje la tensión y no aliente a los catalanes a encararse con sus alcaldes.
Núria Marín es alcaldesa de la segunda ciudad más grande de Cataluña y, como el resto de alcaldes del PSC, no cederá locales para el referéndum del 1 de octubre porque la ley que ampara la votación se ha suspendido y, por lo tanto, no es de obligado cumplimiento.