La guerra a la corrupción y a la impunidad fueron parte de las promesas realizadas hoy por el candidato a la Presidencia de Paraguay por el gobernante Partido Colorado, Abdo Benítez, en un acto que cerró su campaña electoral de cara a las elecciones generales de este domingo.
“Vamos a fortalecer nuestras instituciones y luchar contra uno de los mayores vicios que tiene la democracia paraguaya, que es la corrupción y la impunidad. En mi gobierno no voy a permitir que nadie toque la plata del pueblo, que nadie se enriquezca con la plata del pueblo”, dijo ante un auditorio lleno en la ciudad de Itauguá, a 30 kilómetros de Asunción,
Acompañado de su esposa y de su dupla a la Vicepresidencia, Hugo Velázquez, el candidato añadió que a tres días de un “día histórico el Paraguay necesita recuperar valores en la política”.
“La política no sirve de nada si no tiene valores y sirve a unos pocos”, dijo ante los aplausos de los reunidos en el lugar, en el departamento Central, el mayor semillero de votos del país y hasta ahora feudo del opositor Partido Liberal.
El también exsenador dijo que “el Paraguay está unido con un Partido Colorado fuerte y unido. Y el Partido Colorado está unido y fuerte” y subrayó que su Gobierno será para todos los paraguayos y desempeñará un papel “protagónico del nuevo tiempo de Paraguay”.
Mencionó también que como presidente hará énfasis en la inclusión y el desarrollo de las mujeres y que estás estarán presentes en su Gobierno.
“La garantía de un buen Gobierno es tener a mujeres como compañeras de trabajo en los próximos cinco años (de gobierno)”, dijo.
En el acto también participó el expresidente Nicanor Duarte (2003-2008), pero estuvo ausente el presidente paraguayo, Horacio Cartes, quien ha acompañado a Abdo Benítez en la mayoría de los actos de campaña.
De las elecciones, a una sola vuelta, saldrá también la conformación del Congreso y autoridades de los 17 departamentos gubernamentales.
A la Presidencia se presentan diez candidatos, si bien quienes cuentan con posibilidades reales de alcanzar el cargo son Abdo Benítez y Alegre, que es además el presidente del Partido Liberal, el mayor de la oposición.